La brisa del viento azoto su cuerpo haciendo que cerrara con fuerza sus ojos antes de abrirlos lentamente, noto el césped largo de color amarillo, alguien había olvidado pedir un jardinero, ya que se trataba del césped de una casa, una cabaña estaba a tan solo unos metros. Dipper no lograba ordenar sus pensamientos hasta que logro sentarse y parpadear unas cuantas veces antes de notar que el lugar donde se encontraba era el patio de la cabaña del misterio.
Abrió los ojos como platos y se puso de pie enseguida, lo que provoco que se tambaleara un poco antes de ponerse firme sobre el césped, una ráfaga de viento azoto su rostro como dándole la bienvenida y asegurarle que aquello no se trataba de un sueño.
Sonrío radiante y se apresuro a entrar a la cabaña entusiasmado, no podía sentirse más contento, era una felicidad tan grande que juraba que en cualquier momento le explotaría el corazón por lo fuerte que latía.
Para su sorpresa la puerta trasera estaba abierta así que entro rápidamente gritando el nombre de su hermana y tíos.
-¡MABEL! ¡TIO FORD! ¡TIO STAND! ¡EH VUELTO!- Gritaba con entusiasmo por toda la cabaña, pero no parecía a ver nadie, no se escuchaba ruido.
-¿Mabel? ¡MABEL! – grito ahora con un tono de miedo, ¿Acaso era solo un sueño? Aquella idea hizo que se sintiera mareado, con mucho temor camino con lentitud hacia las escaleras para ir a checar el segundo piso, pero en cuanto alzo un poco la mirada dio un respingo que hizo que saltara hacia atrás por la impresión.
Era Mabel, aquella chica alegre y fiel compañera de Dipper, quien ahora se encontraba sentada al pie de las escaleras recargando sus codos en ambas rodillas mientras aplastaba sus mejillas con amabas palmas de sus manos, su mirada era muy triste, e incluso tenía un suéter azul con un dibujo de una gota de agua, el interpreto el chico como una lagrima.
-Mabel, ya estoy en casa- dijo este suavemente mientras sonreía, sentía mucha felicidad de poder volver a ver su queridísima hermana, pero esta no pareció escucharle, y en vez de alzar la mirada y gritar entusiasmada, soltó un suspiro, un suspiro de pesar y tristeza.
Dipper se sentía confundió, no entendía lo que ocurría.
-Hey Mabel estoy aquí, mírame – dijo este con un tono más fuerte mientras se acercaba a su hermana y colocaba una mano sobre su hombro. Pero este se hundió en el hombro de su hermana, traspasándolo totalmente como si Dipper se tratara de aire.
-¿Q-que carajo?- dijo mientras retrocedía de nuevo asustado, mirando a su alrededor, todo era muy real, el estaba seguro que realmente se encontraba en la cabaña de misterio, volteo a ver a su hermana, y la observo con su corazón latiendo a mil por hora.
-Mabel escúchame... ¡MABEL!- grito desesperado observando a su hermana, ella no parecía ser resultado de un sueño, aunque...ella, ciertamente parecía ser alguien más.
-Mabel ven a comer algo ya casi va a anochecer y no has comido, prepare un poco de tu especial jugó con juguetes dentro y esas cosas, hasta le puse diamantina- dijo el tío Stan quien agitaba entusiasmado la licuadora con el especial jugo de Mabel dentro, pero pareció no entusiasmar a Mabel.
Ella apenas y alzo la mirada para ver a su tío para después agacharla de nuevo.
Dipper miraba todo aun mas confundido, el era sin duda su tío, aquel lugar era su hogar...pero ¿Por que parecía ser que todo era real a excepción de él?
-N-no yo no... ¿Qué está sucediendo?- dijo de repente con miedo, se miro a sí mismo, cosa que no había hecho, y la sorpresa fue lo primero que asomo a sus ojos al notar que era ligeramente transparente.
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No hay vuelta atrás (Billdip)
RomanceDipper es un chico inteligente que goza de los misterios y matemáticas,dispuesto a dar lo que fuera por mantener a su querida hermana a salvo. Y Bill no desaprovechara esa oportunidad, para completar su plan y aparte...conseguir un nuevo "juguete"...