Lunes 04 de Enero de 2016

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Wazzaa!

Emmm... Solo pasaba por aquí para comentarte que pues, hoy vi a un chico guapo, casi podía escucharte diciendo:

-Hablale.

Ya sabes, no lo hice, y jamás lo haría, y lo sabes, soy demasiado de mierda para hacerlo, además de que mi miedo y mi susceptibilidad a pensarlo todo desde TODOS los puntos de vista me obliga a mejor callar...

Ángel, salí a la calle apenas (A casa de mi tía, no se si recuerdes, donde voy a robar internet) y pase por el Templo, y me puse a pensar un poco en ti, y quiero explicarte porque...

Pasar por el Templo me recuerda a Papá, sé bien, Ángel, que para estar con Papá no se necesita un lugar especifico, y que sin importar el horario Papá escuchara lo que sea que quieras decirle, Papá es a prueba de las dos cosas que rigen este Mundo, el Tiempo y el Espacio.

Me encanta como no tienes idea pasar cerca del Templo, y más si están ensayando o es algún Culto, amo como la música se oye a cuadras de ahí. Cuando paso y hay música disminuyo un poco el paso para escuchar un rato -incluso, si nadie esta mirando, me quedo un rato parada afuera -y me gusta hacerlo, porque es estar fuera, lejos de Ellos, pero cerca de Papá.

Y siempre la musica me acompaña después. Siempre que estoy en el Templo, o escucho alguna canción, me entran ganas de largarme a llorar, Ángel, porque sé que estando con Papá puedo ser Yo, puedo dejar de fingir ser fuerte, mostrarme como solo Él me conoce, cuando estoy sin mi Madre o mis hermanas en el Templo, me dejo llevar, se que puedo llorar o reír, gritar, danzar y todo lo que yo quiera, porque con Papá todas las cadenas se rompen, soy libre de ser quien soy, Papá no me juzgara, con Él todas las cadenas que me atan a este Mundo desaparecen.

Ángel, lo mismo me pasa con vos, siento que si estoy contigo estoy segura, que puedo correr a ti en busca de refugio, que contigo puedo se Yo misma, ser quien soy en realidad, porque Ángel, sé que Papá me envió un ángel cuando vio que lo necesitaba, y ese ángel fuiste tú. Contigo, puedo hablar de lo que sea, puedo llorar si se me da la gana y no pasara nada, estar cerca se ti, oler tu aroma, sentir tu tacto, eso podría eliminar cualquier tristeza que yo sintiese.

Una vez dijiste, Ángel, que pensabas que tú y yo eramos parecidos, y Ángel yo lo negué, porque no podía aceptar la verdad, porque resulta que tenías razón, tú y yo somos como "dos gotas de agua" misma personalidad, mismo carácter (Y eso quedo demostrado), hasta de pensamiento coincidimos, si nuestros ideales no coinciden es porque hemos sido criados de distinta forma, y aun así, pese a que recibimos distinta educación, nuestros pensamientos y argumentos van tan paralelos.

Ángel, sí, nosotros sí somos parecidos, por no decir iguales, pero eso no debe pasar, yo estoy Destruida, sin salvación, espero que tu JAMÁS estés algo parecido.

Pero Ángel, aquí entra otra cosa, te conozco. Te conozco. TE CONOZCO. Aunque vos no lo creáis, os conozco mejor que a nada. Y no Ángel, no es porque crea saberlo todo, ni por algo así, te conozco porque te pareces a mí. Y yo me conozco.

Pero vale, he escrito demasiado y ya debo dormir, mañana nos hablamos. O más bien, te hablo, ¡Ya! Reír no te hará daño 7u7r

Vale ya, dejo mis chistes sin sentido para luego, ahora me voy.

Adiós.
Siempre tuya.
Aran.

Cartas a un ÁngelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora