Stockholm Syndrome- Larry Stylinson

Capítulo XI.

By Zayn:

No quería despertar, mi cabeza parecía partirse en mil pedazos. Unos pequeños pero molestos rayos de luz no dejaban que habrá los ojos del todo.

Suspire con pesadez y refregue mis ojos con la yema de mis dedos para poder ver con mejor claridad.

Mi cuerpo dolía por completo, sentía como que me habían dado mil golpes por todas partes; inmediatamente reaccione y caí en la realidad, me altere y comencé a mirar a mi alrededor asustado.

El lugar era horrible, aunque no podía ver mucho. Estaba en una habitación o galpón o quien sabe donde, estaba totalmente oscuro y abandonado. Solo había una pequeña ventana que permitía entrar aquellos rayos de luz.

Mire a todos lados y me di cuenta que no estaba solo, a mi izquierda estaba sentado roncando como una morsa, el señor que me había golpeado y lo había ayudado al rizado a meterme dentro de la camioneta.

Lo miré e intente ponerme de pie sin hacer ningún tipo de ruido, pero fue inútil ya que el señor ya había abierto sus ojos. Me quede inmóvil y el señor tomo una radio, como esas que utilizan los policías para comunicarse.

- Señor, ha despertado. - Anunció apretando un botón de aquél aparato haciendo que este chillara.

- Okey. - respondió esa voz tan familiar del otro lado de la radio.

Al instante reconocí que esa voz era de la persona con la que había hablado por teléfono, y estaba seguro que esa voz pertenecía al joven con cabello rizado.

Toqué mis bolsillos para ver si aún conservababa mi celular, pero como era de esperarse, no lo tenía.

- Tranquilo chiquito, ahora vendrá el jefe y ya verás lo que sucederá, pero mientras quédate quieto o voy a tener que utilizar mi mano dura.

Me quedé inmóvil tal como el me dijo, estaba asustado y eso era una obviedad. El hombre era mucho más fuerte que yo y probablemente estaba armado, no podía defenderme.

Pero había una pregunta que me estaba comiendo la cabeza, ¿estaba en el mismo lugar que Louis?, de repente sentí como un gople de angustia me pegaba en el pecho, pero me límite a llorar.

Tenía que ser fuerte por Louis, solo por él.

By Louis:

Me encontraba en la habitación donde hice el amor con Harry por primera vez, un nudo se formó en mi garganta al recordar esa noche.

Era todo tan bizarro y extraño pero cada vez me acostumbraba más a la situación "rara" que estaba viviendo, me había acostumbrado a estar en sus manos y tal vez no tenía tantas ganas de volver a casa, lamentablemente tenía un Síndrome de Estocolmo grandísimo, estaba enamorado de la bestia de Harry.

Pero sabía que eso era un gran error, porque aunque el dijo que sentía algo por mi tal vez lo dijo solamente para callarme. Tal vez el no sentía nada por mi y solo quería hacerme daño,y eso me daba mucho miedo y era lo que más temía.

Algunas noches me acostaba rogando que Harry atravesará por la puerta y prefería que me golpeara antes de no tenerlo cerca, necesitaba estar cerca de él, era una maldita sensación que no me dejaba en paz, lo necesitaba tanto a Harry como al aire para respirar, y ahí fue cuando me di cuenta que me estaba convirtiendo en un enfermo, incluso peor que él. Pero no me disgustaba del todo ser un enfermo por amor, un enfermo por Harry.

A veces le temía, otra veces moría de ganas por besar sus labios rosados y hacerle el amor toda la noche y a veces lloraba en silencio y quería regresar a mi vida de antes.

Harry me estaba enfermando y siento que no hay cura. Siento que me asfixia el amor que siento por Harry y es muy difícil controlarme.

Se abrió la puerta y me sobresalte al ver a Harry acercándose a mi. Con sus enormes manos tomó mi mentón y me obligo a mirarlo a sus ojos los cuáles me volvían loco.

- Tengo una sorpresa para ti. - dijo sonriendo y con su voz más ronca de lo normal.

Tomó mi mano y nos dirigimos por un pequeño pasillo, está vez sin un pañuelo.

Harry abrió una puerta y pude distinguir que era el galpón donde siempre estaba, pero mi corazón dejo de latir cuando lo vi, lo vi a Zayn.

By zayn:

Cuando vi a Louis entrar por esa puerta sentí como toda la habitación se iluminó con su luz, Louis tenía luz propia, como un ángel.

Me puse de pie y me tire arriba de Louis prácticamente, envolviendolo en un abrazo protegiendolo del mundo y apretujandolo todo.

Louis correspondió el abrazo y me envolvió en sus brazos aún mas fuerte. Ambos caímos al piso arrodillados pero sin separarnos uno del otro.

Aquélla imagen de nosotros quedaría grabada por siempre en mi corazón. Ambos arrodillados, abrazandonos prácticamente hasta quedarnos sin aire, llorando como dos niños pequeños.

De golpe se me vino aquella imagen, aquél recuerdo y llore aún con más fuerza.

Apenas teníamos 8 años, Louis era el mejor jugador del pequeño equipo de la escuela donde íbamos. Había anotado 3 goles derrotando al equipo contrario.
Término el partido y Lou me había dicho que lo esperara afuera de los vestidores que él saldría en un momento. Tardo más de lo normal pero no me preocupé. Cuando salió su pequeña nariz sangraba y tenía un golpe en su ojo derecho. El lloraba, lloraba sin parar, lo envolvi en mis brazos y ambos arrodillados en el piso nos abrazamos fuerte sin soltarnos.

- Zayn, me hiciste mucha falta hermano. - dijo entre sollozos pero aún sin despegarse de mi.

No podía creer que Lou estaba bien, sentí como mi corazón se llenaba y un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, era imposible, lo había soñado tantas veces a este momento que ni siquiera sabía si era real.

Nos quedamos unos minutos más en esa posición hasta que decidimos separarnos y mirarnos a la cara.

Tomé la cara de Lou entre mis dedos y nos miramos fijo. Louis estaba flaco, y tenía unas ojeras incluso peor que las mías. Aún así estaba limpió y sus encantos aún los conservaba.

Miré la puerta y está estaba cerrada, estábamos solos.

- Pensé que iba a morir lejos de ti Lou, como estás por favor dime - dije limpiando sus lágrimas con la yema de mis dedos.

- Estoy bien, como estás tú? Y Liam? - dijo sonriendome tiernamente como solía hacer él.

- Te extrañamos mucho pero estamos bien, Lou te han hecho daño? No se lo que pasará tengo mucho miedo no quiero...

Louis tapó mi boca con sus pequeñas manos y me miro con sus ojos azules, que aún mantenían su brillo intacto.

- No pensemos en eso, sólo disfrutemos esto Zayn. - dijo y puedo decir que con esa simple frase me sentí más tranquilo, el tenía razón, debíamos disfrutar.

Después de unas horas de hablar y contarle todo, Louis se quedó dormido en posición fetal apoyando su cabeza en mis piernas. Yo miraba aquélla dulce imagen y la grababa en mi mente.

Luego de unos minutos el sueño parecía apoderarse de mi cuerpo, asique con mucho cuidado apoyé la cabeza de Lou en el suelo y me acosté a su lado abrazandolo y pegando mi cuerpo con el suyo.

"Lou, te amo pequeño" susurre a su oído, sabía que me podía escuchar.

Yo también cerré los ojos y caí en un profundo sueño.