CAPITULO 11

31 0 0
                                    

-¿¡Por que llegaron tan tarde!?, ¿Donde esta Greek? -escuché que alguien reclamaba mas adelante, era esa mujer, Britany.

-Otra vez esa policia, eso fue lo que pasó. Y Greek ... ¿Donde está? -contestó el conductor volteandonos a ver.

-Saltó del auto -contestó George, aunque notaba algo de nerviosismo en su voz. -Pronto volverá -añadió.

Me habia quedado cerca de esa habitación, no queria entrar, pero si queria ver que es lo que hacian.

-Si... por cierto, ¿Donde esta la chica? -volvió a preguntar esa mujer, pero al instante supe que se trataba de mi.

Retrocedi un poco aunque sabia que me vendrian a traer, en efecto, el hermano de Greek vino a sacarme del pasillo con un poco de mal humor reflejado en su cara. Es la segunda vez en esta noche que estoy cara a cara con ella.

-Ah, aqui estas.

-¿Que es lo que quiere de mi? -dije en voz baja sin apartar la vista.

Salió de atrás de una mesa y se puso a un vostado de ella.

-Quiero hablar con ella a solas -dijo haciendo que los demás se fueran, siendo George el último en salir ya que se nos quedó viendo con algo de miedo en su cara. Después de oir como se cerraba la puerta detras de mí continuó hablando:

-Debes saber que eres un elemento muy importante para nosotros, aparte de poseer la información que necesitamos me he dado cuenta de que tienes algunos atributos como la belleza y la agilidad. Y además sabes como aprovecharlos.

-¿De que está hablando?

-Hablo de cuando escalaste ese árbol en la casa de tu amiga con bastante destreza, de cuando arrollaste a un empleado en el centro comercial o de cuando intentaste matar a un hombre con un martillo, ¡Mejor aún!, cuando estabas en la fiesta y seduciste a un hombre que te había atrapado sólo para poder defenderte y escapar de él.

Estas personas conseguían sorprenderme cada vez mas pero al mismo tiempo me confundían tanto que no sabia por donde empezar a preguntar.

-¿Como es que sabes eso?, ¿Que clase de imformacion es la que necesitas?, ¡¿Que esta pasando aqui?! -dije con un aire de desesperacion, intentando quitarme las esposas. La mujer comenzó a reirse un poco, pero me di por vencida. -Además, yo no he matado a nadie, fue otra persona la que lo hizo con el martillo -añadí.

-¿Quien fue?

-No lo se, no pude verle bien la cara -mentí, pero lo hize para defender a mi amiga de cualquiera de estos sujetos malos, mencioné que ha sido otra persona para que no crean que soy yo la asesina.

-No intentes engañarme, sabemos que fue Elizabeth, solo quería probar que tan buena eras mintiendo.

-¿Como es que la conoces?, ¡respondeme ya!-dije fuera de control, acercandome a ella, de lo cual me arrepentí al instante.

-Hey, alto ahi -sacó un arma de su bolsillo trasero, apuntandome con ella.

Mi corazon se paralizó por un instante y abrí la boca de la sorpresa al mismo tiempo que una amarga sensación recorria mi lengua.

-No vuelvas a acercarte asi. Elizabeth forma parte de nuestro equipo, y ahora tu también lo estas. Pero no te liberaremos aún, luego lo haremos. -Al terminar la frase, bajó el arma, se dirgió a la puerta y la abrió. -¡Doc!, ven aqui -gritó por el pasillo y un momento después George entró a la habitación, Britany le dijo algo en el oido, asentio sin dejar de mirarme y luego ella salió dejandonos solos.

-Muy bien, el doctor ha llegado a curarla, veamos como se encuentra mi hermosa paciente -dijo en un tono un poco gracioso mientras se quitaba el estetoscopio del cuello con ambas manos, dejandolo sobre el escritorio. Se acercó un poco a mi y retrocedí hasta chocar con la pared. Una sonrisa inocente se formó en su cara.

-No tengas miedo Lindsey, solo quiero ayudarte.

Solo espero que lo diga enserio, por que con todo lo que ha pasado esta noche no logro pensar con claridad.

-Britany me ha dado algo de comida, la suficiente como para que ambos quedemos satisfechos. -su sonrisa se intensificó algo mas y me tendió un plato con comida, al ver que que yo no hacia nada añadió:

-Comeré yo primero para que veas que no hay nada de malo en ella -se metió un trozo de comida en la boca y empezó a masticar -Está delicioso, come, luego podremos hablar de lo que quieras -dijo aún con algo de comida en la boca. De rrepente todo empezaba a ponerse... ¿Cómodo?, quizá tenga la razón, pero eso no significa que deba de bajar la guardia ante ninguna circunstancia. Confié en George y empezé comer timidamente. Al verme hacerlo, se puso feliz y me sonrió, no pudiendo evitar devolverle el gesto.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 21, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

EXTASIS Donde viven las historias. Descúbrelo ahora