¿Qué hay detrás del antifaz?

Capitulo 6: Nuevos encuentros

Tom

El tiempo se detuvo en mi mente y mi alama que no me fije que ya había anochecido, estaba tan contento de haberle escrito fue una de las mejores decisiones que he tomado.

Me encanta saber que podre seguir hablando con ella sin preocuparme de nada pues a pesar de que se acabe el tema del que estemos hablando siempre aparece uno nuevo con el cual volver empezar.

Mañana me levantare temprano pues tengo planeado ir al parque cercano a casa a correr, y despejarme.

Jen

Son las 8 de la mañana, y lo primero que hago al abrir mis ojos es mirar mi teléfono solo por si quizá el me haya escrito, no me equivoco tengo un mensaje suyo y solo al mirarlo ya sonrió. Es una de las mejores maneras de empezar el día.

-buenos días mi hermosa chica del antifaz.

- buenos días Tom, veo que eres un hombre madrugador

- pues si de hecho estoy a punto estoy a punto de salir.

- yo igual hoy debo acabar un cuadro que estoy pintando y tú que harás?

- yo por el momento ejercicio

- interesante quizá y algún día podamos salir juntos

Hasta esperar su respuesta me dispuse a recoger todas mis cosas para ir al pequeño parque cerca de casa en el que estoy pintando.

Mi madre aun dormía así que le deje una nota diciéndole que estaría pintando y salí de casa.

Tome mi celular para ver que me había respondido.

Tomas

Desperté temprano y lo primero que hice fue escribirle a ella aunque seguramente aun ni despierte. Envíe el mensaje y mientras esperaba me alistaba para salir como lo planifique ayer.

Ya salía de casa y vi su mensaje

-interesante quizá y algún día podamos salir juntos.

Quiere salir conmigo que emoción que tengo así que respondo que cuando quiera.

Estaba caminando tranquilamente cuando me tropecé con alguien y caí. No puedo creer cuan despistado soy, levanto la vista para mirar a la persona con la que tropecé y era una chica muy bella pero para ser sincera después de ver a Jen no tenía ningún interés por fijarme en nadie más.

Jen

Estaba acabando de responderle a Tomas pero un chico despistado se atravesó haciéndome caer. Estaba enfadada había perdido mi maleta y mi lienzo casi se rompe, estaba dispuesta a decirle unas cuantas palabras al muchacho despistado pero cuando lo vi no pude evitar reírme, como son tan grandes las casualidades de la vida, si, era el Tomas.

Lo siento - me dijo, seguramente no sabe quién soy solo me había visto con el antifaz, se acordara de mi voz no lo sé pero de todos modos hable.

- No hay problema.

Él se quedó callado y lo supe, me reconoció, si lo hizo.

- Jen?

- Tomas

- Eres tú, no pensé que me iba a encontrar tan pronto contigo, discúlpame por mi culpa casi se rompe tu lienzo.

- Tranquilo no pasó nada, pero que casualidad.

- Es verdad, aunque de hecho te dije que salía a hacer ejercicio, y yo vivo por aquí.

- Una nueva coincidencia, yo también vivo por aquí.

- Ya que nos encontramos te gustaría tomar un café conmigo?

Tomas

No la reconocí hasta que escuche su voz, y era lo más lógico porque el día en que nos vimos yo no vi su rostro porque estaba usando el antifaz. Estaba hermosa y estoy seguro de que ambos estamos destinados a estar juntos, tantas casualidades no pueden ser en vano.

Sin duda alguna le invite un café, ella acepto. No hubo una mejor manera de empezar el día, caminamos juntos a una cafetería que hay cerca de donde estábamos y fue ese café testigo del inicio de nuestra hermosa historia.