~CAPÍTULO 53~Celos confusos

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-De nada (TN)—sujetó mis manos entre las suyas—sabes que siempre vamos a cuidar de ti—Me volvió a guiñar el ojo—

-Ahora ya sales con otro—La voz de JungKook demasiado cerca. V y yo giremos de inmediato, encontrándonos con él justo en la esquina de mi casa, apoyado en la pared y con la mirada seria hacia nosotros-- ¿Nuevo pretendiente? ¿Hay más?—

-Pero este idiota—V se dispuso a levantar el puño, pero yo lo detuve sujetándolo—

-Ignóralo—sonreí con cierta tristeza—Por mi... ignóralo y has como si nada—

V me observó por segundo y luego suspiró volviendo hacia mí—

-¿Me vas a ignorar? ¿Qué? ¿Acaso no te importa que vea cómo tú y tu nuevo pretendiente me lo restriegan a la cara?—

-Hasta mañana V—sonreí acercándome para darle un beso en la mejilla—Cuídate vale—

-Vale (TN), cuídate y sueña conmigo—me guiñó como siempre—

-Ok—sonreí un poco vacilante. Giré de inmediato observando sin querer a JungKook. Él me observaba ¿furioso? ¿Enfadado? ¿Celoso? No lo sé, no sé ni siquiera por qué está aquí... ¿Pretende torturarme? Porque si es así lo logra muy bien.

-¡pues bien!—Gritó Kook—¡Puedes salir con quien te dé la gana! ¡Jamás te amé! ¡Puedes irte con otro!—Gritó antes cuando estaba cerrando la puerta. Me aislé de la calle y me quedé dentro de mi casa, con el corazón hecho añicos y mis lágrimas queriendo salir de mis ojos.

-Hija—la voz de mi madre-- ¿Te ocurre algo? Escuché a alguien gritar—

-Te debe de haber parecido madre—Dije girando y mostrándole una sonrisa que estaba obligándola a salir a flote—Estoy cansada, iré a realizar mis deberes—

Caminé hasta la sala y luego subí las gradas, tratando de no llorar en frente de mi madre... No (TN), tú ya no vas a llorar... ya has llorado suficiente... no te dejes caer, no seas débil o los demás te pisotearán si lo eres.

Ingresé a mi habitación y dejé mis cosas, luego me acerqué a la ventana y escondiéndome tras las cortinas traté de ver si él todavía estaba allí, pero no... no estaba... Kook se había ido sin ni siquiera poder entender por qué había venido... tonto... ¿Por qué no me dejas olvidarte con facilidad?

La noche fue larga, demasiado diría yo... me preguntaba cómo pudo pasar de un momento tan excitante a uno en donde él y yo jamás volveremos a estar juntos. Tal vez él jamás estuvo deparado para mí, y si fue así, hubiese preferido que jamás hubiese regresado y de ese modo estría tranquila, sin pensar en él o sin que el corazón se me haya hecho trizas nuevamente... Hubiese preferido mantener el recuerdo de aquel rompimiento de dos años a que este rompimiento que me ha dolido aún más... ¿Cuánto duramos? Unos días... definitivamente ninguno de los dos es para el otro... nuestro destino jamás fue estar juntos.

A la mañana siguiente decidí colocarme la ropa que los chicos me habían comprado, puesto que sabía claramente que ellos esperaban que lo hiciera.

Me puse la hermosa falda roja con pliegues y el top rojo, de alguna forma sentía que se me veía más que genial con ello. También me puse unos zapatos negros que combinaban con mi top y me solté el cabello colocándome un lazo rojo a un lado.

-Perfecto—me sonreí al espejo sin poder evitar pensar en que si a Kook le llamará a la atención. Basta (TN)... ya no pienses en él... ya no lo hagas.

Me apresuré y tomé mi cartera con mis libros, y de inmediato bajé a desayunar para luego salir a directo a la universidad. Al llegar bajé de para puesto que ya iba tarde, sin fijarme en cómo me miraban fui directo a mi casillero, metí algunos libros que un no necesitaba y saqué otros. Giré para marcharme pero algo me detuvo... unos ojos cafés fijos sobre mi... era JungKook quien me observaba con los labios entreabiertos, pero al notar que noté que me observa, de inmediato giró la mirada haciendo como si nada. No pude evitar no sonreír... me había estado mirando... creo que los chicos tienen demasiado buen gusto para escogerme esta ropa que me encanta. Levanté la mirada al frente y cerrando el casillo empecé a caminar en dirección de JungKook, es decir, en dirección a mi aula, pero JungKook estaba por allí, así que pasé por su delante e hice como si no lo viera. Genial... Eso es (TN)... Confianza.

Una Pareja dispareja. ReconquitándoteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora