Mi vida estaba completa. Lo amo.
Estábamos en San Clemente finalmente, respirar el ambiente de relajación y tranquilidad se sentía en paz, nada que ver con la ciudad.
Zayn estaciono el auto que habíamos comprado justo un año anterior, gano el auto es rojo y deportivo, muy lindo y cómodo.
-Señor Malik, señorita Morrison bienvenidos a su casa –nos recibió Mo bajando las maletas de la cajuela.
-Hola Mo –saludamos al unisón.
Entramos a nuestro viejo hogar, simplemente era igual que antes pero era bueno sentirse como en casa realmente.
-¿Zayn? –hablo la voz en cuestión. No fue necesario preguntarme quien era, lo sabia, era la madre de mi chico.
-¡Mamá! –Zayn se lanzo a su madre como un pequeño dándole un fuerte abrazo.
-¡______! –exclamo la inconfundible voz de mi padre a mi espalda.
Me gire y ahí estaba él parado frente a mi, lo mire por segundos, contemplándolo. Lo extrañe, ahora que lo conocía que sabia la persona que era realmente me hizo extrañarlo interminablemente, me acurruque entre sus fuertes brazos, me penetre en su olor y sonreí feliz de tenerlo junto a mi.
-Hola papá –dije finalmente.
Era tarde y Louis y Mandy aun no llegaban de su viaje, así que fuimos a descansar. Ya los veríamos.
Luego de desayunar y de platicar un rato con mi padre y Trisha fuimos a caminar a la playa. El sol estaba resplandeciente y era un clima muy agradable.
-Siempre hacia esto con mi madre –conté mirando el agua mojar la punta de mis pies.
-Se siente bien –Zayn me tomo por la cintura juntándome a él.
-Quiero ir a verla pero, siento que saldré corriendo de ahí sin aceptarlo aun –dije hablando lento.
-Eres fuerte, se que lo eres –dijo besando mi cabeza.
-No lo se Zayn, a veces creo que todo esto solo es un sueño –inquirí mirando el horizonte.
-Todo esto es real, tarde o temprano sucedería, solo que se adelanto –sentí como rodeo mi cintura, poniendo su barbilla en mi hombro.
-Me hace tanta falta –suspire.
-Lo se mi amor, es normal –dijo sosteniéndome mas fuerte, dándome fuerzas para seguir respirando.
Luego de un rato caminamos por la orilla de la playa y para cuando calculamos que los chicos ya debieron haber llegado, fuimos hasta casa. Trisha había organizado algo con los tíos de Zayn, ósea los padres de Mandy y claro estarían también los padre de Louis dándoles la bienvenida.
-Quiero ver a los chicos, creo que deberíamos invitarlos –dije bajando la ventana del auto.
-Si, vamos a sus casas –dijo Zayn mirando por el retrovisor.
-Tal vez con suerte y estén, quien sabe si Niall habrá venido de Canadá y si Harold se abra ido –dijo con el gesto torcido.
-Pues chequemos –dijo Zayn.
Estacionamos el auto frente a la casa de Harold.
Respire hondo antes de tocar la puerta, no sabia por que pero estaba nerviosa, y emocionada. Toque la puerta con tres ligeros golpes, escuche como alguien corrió dentro de la casa y cuando lo vi sonreí inmediatamente.
-Que suerte que estas, ¿Cómo estas? –cuestione en un suspiro de alivio, dándole un abrazo.
-Muy bien linda, ¿Cómo estas tu? –cuestiono dando un beso en mi mejilla.
-Bien gracias.
-¿Qué hay amigo? –pregunto Harold mientras abrazaba a Zayn en un abrazo de esos de los que los hombres se dan.
-Todo bien –respondió Zayn al alejarse de él.
-Oye habrá una reunión en nuestra casa ¿puedes venir? –cuestione casi obligándolo.
-Suena bien, ¿estoy invitado? –pregunto algo sorprendido.
-Yo te estoy invitando –dije empujándolo por el hombro.
-Pues suena bien, gracias –acepto con una de sus lindas sonrisas.
Íbamos de camino a casa, Harry iba en la parte trasera.
-Oye ¿sabes si Niall esta en el pueblo? –cuestiono girándome para mirarlo.
-Si, de hecho llegaron hace un rato –respondió asintiendo con los ojos grandes.
-Genial, vayamos por ellos –le dije a Zayn mirando su perfil.
-Claro –tomo mi muslo con la mano que no llevaba al volante.
Llegamos y Zayn hizo sonar el claxon, paso menos de un minuto y enseguida salió Niall usando ropa para echar flojera toda la tarde, me baje del auto quería saludarlo bien.
-¿Cómo estas linda? –dijo luego de darme un fuerte abrazo.
-Genial ¿Cómo estas tu? –pregunte mirando sus hermosos ojos azules.
-Bien, cansado pero bien –dijo sobándose el estomago.
-¡Hey Niall! ¿y Lucia? –cuestiono intrigado Harry.
-Esta adentro –dijo apuntando la casa-. ¡Hey hola Zayn!
-Hola Niall –dijo Zayn mirándolo por la ventana.
-Bueno pues de hecho vengo a invitarlos a la casa, habrá una reunión ¿quieren venir? –pregunte recargándome en el auto.
-Suena bien, le diré a las chicas –pauso-. Si quieren váyanse, nosotros los alcanzamos allá.
-Pero van –advertí apuntándolo con mi índice.
Llegamos a casa y en la parte de atrás ya estaba la familia de Zayn y la de Louis, los chicos aun no llegaban, solo faltaban ellos.
-Esto es tan emocionante –me entusiasmaba volver a ver a los chicos.
-Si lo se –dijo este mirando la piscina.
El momento esperado llego, todos comenzaron a echar relajo cuando los chicos llegaron. Saludaron a sus padres y familiares hasta llegar con nosotros.
-¡Amigo! –exclamo Louis abriendo sus brazos a Zayn.
-¡Mandy! –grite al abrazarla.
-Oh aquí esta la chica del gran hombre –me dijo Louis al sonreírme, y luego dar paso a abrazarme.
-Hola Louis, te ves bien –dije mirándolo.
-Dios como extrañaba San Clemente –dijo Mandy mirando a su alrededor.
-Si, yo también –dijo Louis dándole un beso en la mejilla a su chica.
-¿Qué tal Europa? –pregunto Zayn mirando a el castaño.
-Es increíble, las chicas son hermosas deberías ir –jugo Louis mirándome de reojo.
-¿Ah si? ¿Qué dice Mandy sobre eso? –pregunte mirando a Mandy.
-Déjalo ya sabes como es –rio.
Estuvimos un buen rato platicando, y claro que hubo una buena reunión, fue divertido.
Entramos a una de las mejores tiendas de Nueva York, me tenía que ver fantástica seria la noche de nuestra graduación, Ale y yo estábamos que no cabíamos de la emoción, terminábamos nuestras carreras. Habían pasado tres años y no podía ser más feliz.
-Este es lindo –dijo Ale tomando un vestido, probándoselo por encima.
-A mi me gusta este –dije tomando otro.
Era difícil escoger un vestido, siempre lo era o al menos para mi. El entusiasmo de saber que terminabas la etapa para dar el salto en tu futura vida era muy excitante. El salón era perfecto, no había cosa más increíble. Zayn lucia guapísimo en un traje de ceda del mismo color que mi vestido, un gris oscuro.
-Te ves encantadora –me repitió Zayn por milésima vez.
-Gracias, tu también te ves guapo –dije acomodando el cuello de su camisa.
Miraba como Ale miraba con tanta ilusión a Liam cuando bailaban al ritmo de una canción lenta, ellos se besaban a cada oportunidad que tenían, estaba feliz por ellos.
Zayn regreso con dos vasos de ponche, voltee mi mirar a él que miraba a Liam y a Ale. Volteo a verme y sonrió dulcemente, él no quería bailar dijo ser pésimo en eso. Nos quedamos mirando en silencio, extendió su mano a mí y dijo:
-¿Quiere bailar?...
