-¿Qué condición? -pregunte.
-¿Qué tal si la condición fuera que me besaras? -dijo levantándose de la cama.
-No te voy a besar -le dije mientras veía como se acercaba a mí.
-Pues entonces no te diré nada -dijo encogiendo los hombros mientras miraba al suelo.
-¿Es enserio lo que me pides? -me sorprendí.
-¿Acaso me estoy riendo?
-No me contestes con otra pregunta -le dijo con molestia.
-No puedo hablar más enserio Rosie -dijo mirando mi labios.
-Pues no te besare -dije retadora.
-¿Segura? Por qué esta podría ser tu única oportunidad -dijo mordiendo su labio inferior.
-Segura, pero gracias voy a averiguar por otra parte -dije antes de salir dando un portazo.
Salí del cuarto de Zayn, ¿Qué es lo que pasa con este chico? Me pregunte, iba bajando los escalones y me topé con Mandy la prima de Zayn, la agarre del brazo haciéndola bajar conmigo y salir de la casa lo antes posible.
-¿Qué problema hay entre Harold y Zayn? O Entre Harold y mi padre -pedí explicación a ella, seguramente sabía algo.
-Oye primero, lo siento por lo de anoche debí defenderte -dijo ella bajando la mirada.
-No importa, tú debes saber qué pasa con Harold ¿Por qué no lo quieren en casa? -volví a insistir, mientras caminábamos por ahí.
-El papá de Harry, era socio de tu padre y le hizo un fraude dejando casi en banca rota a tu papá, es por eso que tu papá no puede ver ni en pintura a Harry -explico quedándose parada frente a mí.
-¡Wow! Eso sí que no me lo esperaba -dije tapando mi boca con mi mano.
-Si bueno, Harry es un buen chico pero tu padre le tiene rencor por lo que su papá hizo -dijo Mandy.
-Pero fue su padre, Harold no tiene la culpa -dije haciendo una mueca con mi boca.
-Si lo sé, tu papá es muy recto -dijo Mandy como si le tuviera miedo.
-Sí, es un gruñón -dije con una risita.
Comenzamos a caminar, llegamos hasta la feria sin darnos cuenta.
-Te gusta mi primo ¿No es cierto? -cuestiono mirándome elevando una ceja.
-¡Claro que no! Es muy guapo, no voy a mentir pero no me gusta además, es muy raro conmigo -dije rascando mi cabeza- . Si te cuento lo que paso hoy ¿No le dices a nadie?
-Lo prometo -dijo levantando la mano en forma de promesa.
-Me dijo que si lo besaba, me diría porque mi padre no quiere ver a Harold -confesé encogiéndome de hombros.
-No lo puedo creer, Zayn es raro pero nunca le pediría eso a una chica a menos...
-¿A menos que, qué? -cuestione desesperada de escuchar lo que seguía.
-A menos que en verdad le atraiga, el está acostumbrado a pedir algo a una chica y que ella se lo de -dijo Mandy quitada de la pena.
-No creo, quiero decir mira a su novia no tiene ni un cabello que tenga yo -dije echando mis manos al aire.
-¿De qué hablan? Mi amor -dijo la inconfundible voz de Louis.
-Aquí Rosie que en pocas palabras dice que no es bonita -dijo Mandy volteando a ver a su novio dándole una probada de labios.
-Oh vamos Rosie claro que no eres muy bonita -dijo Louis amablemente.
-Pues gracias Louis.Seguimos caminando y en el camino me encontré con dos caras muy familiares, eran Harold y Niall.
Rápidamente me acerque a Harold para seguido escabullirnos entre la multitud de gente que había en la feria.
-Ya sé por qué mi padre no te quiere en la casa -le dije muy cerca.
-Sí, no te quería decir por qué creí que te molestarías conmigo -me dijo sin mirarme.
-No creo que una persona se pueda molestar con alguien como tú -dije sonriendo.
-¿Entonces seguiremos siendo amigo, como si nada hubiera pasado? -pregunto con cara de preocupación.
-Como si nada hubiera pasado -repetí dándole un abrazo.
Era imposible poder molestarse con Harold, si es que eso podría ser posible. Comenzamos a buscar con Niall que por cierto lo habíamos dejado con una chica no tuve tiempo para preguntas antes pero ahora ya lo tenía y podíamos tal vez pasar un rato juntos.
-Hola Rosie, te presento a mi novia Marielva -dijo apuntándome con su mano, mientras la chica se acercaba a mí.
-Hola mucho gusto -dije contestando a su beso en la mejilla como saludo, una chica muy hermosa, cabello largo, de piel blanca y una sonrisa muy tímida.
-¿Qué hacemos? -pregunto Harold, interviniendo el momento.
-Vayamos a los juegos -sugirió Niall, mirando esa temible montaña rusa.
-Ni loca, odio las alturas -dije sintiendo un hueco en mi estómago, el miedo comenzaba a manifestarse.
-No vas a salir con la típica excusa -dijo Harold, tomándome de la cintura llevando a hacer fila.
-No creas que sonreírme, y abrazarme me hará cambiar de opinión -dije al blanco atractivo.
-Vamos soy encantador, si te beso la mejilla apuesto a que dirás que si -dijo incrédulo.
-No voy acceder a eso -conteste a su divertido comentario.
-Vamos Rosie será divertido -dijo Niall.
-No pasa nada, lo prometo -dijo la pequeña novia de Niall.
Me eche a correr en cuanto deje de sentir los brazos de Harold en mi cintura, y comencé a reírme cuando mire que este me perseguía muy de cerca y empecé a hacer a un lado a gente que me estorbaba en el camino, no dejaría que Harold me alcanzara, no iba subir a la montaña rusa por más que me lo suplicara, corrí hasta llegar a la playa puesto que quedaba muy cerca de ahí y mis piernas me pedían a gritos un breve descanso y mi pecho me pedía aire, así que me detuve.
-Eres rápida -dijo el hermoso chico de cabello rizado.
-Un poco, pero me canse demasiado -dije con mi mano sobre mi pecho, respirando repetidas veces.
-Entonces no podrás evitar que te lleve en brazos -dijo inclinando su cuerpo para tomarme de las piernas.Me tomo de las piernas con un brazo y rodeo mi espalda con el otro, mientras caminaba yo rodee su cuello con mi brazo y reía, 'Ahorita me vuelvo a escapar' le dije entre carcajadas, y ahí íbamos ya entre la gente y Harold conmigo aun en brazos.
Al llegar con Niall y Marielva me bajo y comenzamos a reír mientras aun estábamos abrazados, pero de un movimiento rápido quedamos muy de cerca, cara a cara, y yo sintiendo su respiración en mi cara.
¿Qué se suponía que tenía que hacer? Estábamos tan cerca que podía besarlo sin que él tuviera el tiempo de hacerse a un lado, pero ¿Besarlo? ¡Claro que no! Aunque no voy a mentir, las ganas no me faltaban, quiero decir es el único que me ha tratado como su fuera una de las únicas chicas en el mundo, es divertido, guapo, adorable ¿Qué más puede pedir una mujer? Pero ¡No! Era solo que me sentía bien con él, pues sabía cómo tratarme y solo era más que una fascinación la que sentía por él.
-¡Vaya, vaya! -dijo la voz aplaudiendo, volteamos rápidamente conmigo quedando boquiabierta mirando que era...