Las alucinaciones seguían en mi cabeza una y otra vez, siempre la misma palabra con una imagen de una persona que vestía de morado, con un cuchillo ensangrentado y diciendo: yo los mate, cada vez me iba volviendo más y mas loco que antes, solo trataba de no pensar en el asesinato de aquellos niños y claro de.......yo los mate. Al llegar las 6 salí del trabajo para descansar un poco en mi hogar, no quería preocupar a mi hijo Simón (nunca lo mencioné) porque el tiene una enfermedad que le hace alucinar, no se como después se dio cuenta sobre los animatronicos..... Seguro a la noche va a alucinar con ellos.........
