Resulta que a Yael no le importó mucho que no me gustara la idea de modelar. No sé como consiguió mis datos para completar el formulario, y mucho menos una foto. Tampoco sé si hizo magia negra o qué para que terminaran llamándonos. Pero ella estaba tan feliz que no tenía nada que discutirle. Me encantaba verla así. Se veía tan linda siendo feliz.
Pero...
-Por algo me llamaron, ¿Has visto?- dijo y me miró sonriendo.- Soy hermosa.
La miré.
-No- la tomé de la cintura y la pegué a mi haciendo que se sonrojara-. Solamente fuiste menos fea que otras.
La miré a los ojos y sentí como el corazón se me desbocó.
Y ella lo supo.
-Es la primera vez que te pones así conmigo Ezequiel.
-O esta es la primera vez que dejo que te des cuenta.
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Crónicas De Un Incomprendido
Ficção AdolescenteToda mi vida estuve aguantando las ganas de gritarle a la gente que se calle cuando hablaba a mis espaldas. Porque sabia que seria inútil, ya que seguro me tomarían por un ratoncito gritándole a un gato a punto de comerlo. Años pasaron de mi primari...