Cap. 10

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Me vestí con el vestido y me arreglé, sali de mi habitación para encontrarmelo sentado esperandome con su traje ya puesto. Sonrió al verme al igual que yo al verlo a él. Bajamos hasta la entrada al hotel y un auto nos esperaba afuera, éste nos dirigió al restaurante l'Archeologia. Jonathan dijo su nombre y un hombre nos dirigió a nuestra mesa, junto a un ventanal. Estaba nerviosa y se podía ver que él tambien. Trajeron nuestra comida y cenamos entre charlas. Se sentía tan bien todo, tan correcto. Ya estabamos comiendo el postre.

Jona: - Para cerrar la cena quisiera proponer un brindis - Sonreí

Yo: - ¿Brindis? ¿Por? - Levantó su copa

J: - Por nosotros - Reí - Por las chicas que rompen tu corazon y por ser tan boludo de haber perdido a mi mejor amiga por haberme enamorado de ella - Sonreí - Salud - Levante mi copa

Y: - Salud buen hombre - Él rió

J: - Que hermoso esto

Y: - La verdad que sí - Asentí. Seguimos comiendo

J: - ¿Vos estas enamorada? - Lo miré

Y: - Si - Dije con cara de obvia

J: - Pero... De Cristian... ¿no?

Y: - Si, de él - Sonreí. Volví a mi cena al igual que él, pero no tardó mucho en distraerse

J: - ¿Vos crees eso de que es posible estar enamorado de dos personas? - Bajé los cubiertos

Y: - ¿A qué querés llegar?

J: - A que digas algo, no sé

Y: - ¿Algo como qué? - Dije ya de mal humor

J: - No tenga miedo de decir lo que sentis

Y: - ¿Vos te pensas que tengo miedo?

J: - Es que... Te conozco, o al menos eso creo, y sé que hay algo que no contas...

Y: - No tengo nada para contar - Me miró rogando con la mirada - No siento nada por nadie mas, no me pasa nada mas. No hay nada m_

J: - Sos una mentirosa Micaela. Hay algo entre nosotros y lo sabes, y me estas mintiendo a mi, le estas mintiendo a Cristian y lo más importante te estas mientiendo a vos misma... - Me interrumpió. Lo dijo como enojado - Estoy cansado de esperar... ¿Si? Ponete en mi lugar

Y: - ¿Tu lugar de qué?

J: - De tener en frente lo que quiero y no poder tocarlo, me cansé de esperar... - Silencio

Y: - No tenes por que esperar - Me miro - Pero capaz, algún día... - Él bajó la mirada y tragó saliva

J: - Si, algun día... - Levantó la mano para llamar al mesero

Y: - ¿Qué haces? - El muchacho llegó

- ¿Que desea?

J: - La cuenta

Lo miré triste mientras le ofrecía su tarjeta de crédito, él estaba con bronca, quería que esta noche sea ideal pero no pudo ser así.

P.O.V. Jona:

Salí de ahí decidio, sabía que ella caminaba detrás mío. Pero no paró en la entrada, siguió caminando. Cerca de allí pasaba un hermoso arroyo por debajo de un puente, entonces caminé en esa dirección a paso apurado.

Lo que tu corazón dicte (2da Temporada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora