Un último adiós. #1 [Acabada]

Capítulo 6: Muestras de cariño.

A la mañana siguiente me desperté me arreglé y me fui al bar a desayunar con Héctor. Llegué y gente allí desayunando, el estaba sirviendo y cuando me vió se vino hacia donde yo estaba.
-Pensaba que no ibas a venir.-Me dijo riendo.
-Y porque pensabas eso?
-Con las copillas que llevabas ayer y a la hora que te acostaste pensaba que no te levantarías...
-Pues ya me ves, ponme un café a ver si me espabilo un poco.- Le dije riendo.
-Te lo pongo con nata o sin nata?.- Dijo él partiéndose de risa.
-Muy gracioso tu, te recuerdo que el que acabaste mas manchado fuiste tú.-Dije mirándolo riendo.
-Bueno, no quedará así la cosa...-Dijo guiñándome un ojo.
-Vienes esta tarde a la playa?.
-No sé si podré...
-Vamos vente, no decías que no querías estar solo? Pues te vienes.-Dije riendo.
-Tu vas?
-No sé, a lo mejor trabajo...-Le dije mirándolo.
-Si no vas tu yo tampoco.- Dijo él riendo.
-Pues voy a ir y así vienes, a que hora pasamos a por ti esta tarde?.-Le pregunté.
-Y si paso yo a por ti? Ana me ha dicho donde vives.-Me dijo con una sonrisilla.
-Vale, vienes después de comer y me recoges?
-Está bien, pues después de comer nos vemos.
-Cóbrame esto y me voy terminar lo del trabajo para tener la tarde libre.
-A este invito yo.-Dijo guiñándome un ojo.
Me fui a mi casa hice los papeleos del trabajo y me puse a hacer algo de comer. Yo estaba que no me lo creía joder, me iba a recoger en mi casa después de comer y nos íbamos a ir a la playa juntos, cada día mejor, ya no me daba vergüenza hablar con él, al contrario, quería estar todo el rato con él. Cuando comí me senté un rato en el sofá mientras que venía Héctor, cuando me estaba quedando casi dormida escuché como alguien pitaba, seguro que era él.
Bajé corriendo, salí y cerré la puerta.
Me subí en el coche y:
-Uy que cara, tu estabas durmiendo.-Me dijo él riendo.
-Que va, estaba viendo la tele solo.-Dije poniéndome mis gafas de sol.
Él me miró y se rió.
Cuando íbamos en el coche no pude evitar dormirme, con el sol de frente me quedé frita, llegamos y noté como alguien me acariciaba la cara.
-La que no tenía sueño, mira que carilla tienes de dormida.-Dijo él riéndose.
-No iba dormida que lo sepas.- Dije riéndome.
-Te he levantado las gafas de sol y ni te has dado cuenta.
Me callé porque llevaba él razón, nos bajamos del coche y fuimos a donde estaban los demás. Lo miré y se me hacía raro no verlo con los pantalones y la camisa negra de camarero, pero madre mía, como le quedaba ese bañador y esa camiseta. Llegamos a donde estaban los demás y:
-Si que habéis tardado.- Dijo Ana debajo de la sombrilla.
-Ha sido Patri que estaba durmiendo y por eso hemos tardado más.- Dijo él riéndose.
-Que mentiroso eres.- Dije riendo.
-Parecéis una pareja.- Dijo Ana riéndose.
-Si, la única diferencia es que no estamos saliendo Ana!
-Por ahora.- Dijo él en bajito.
Me quedé flipando!! Había dicho por ahora, como que por ahora no estábamos saliendo, pero dentro de poco a lo mejor si? Madre mía casi me da un infarto allí en la arena.