Capítulo 34: Al borde del suicidio.

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-Héctor no lo sabe?
-No.-Dije llorando sin poder hablar casi.
-Tienes que decírselo Patri, él está muy mal.
-Ana peor estoy yo, que lo pillé besando a otra.
-Patri que él no hizo nada, lleváis separados casi cuatro semanas y él te quiere, lleva estas semanas que parece otro, ni siquiera come!
-Ana lo quiero, quiero estar con él.-Dije llorando.
-Patri y él contigo, se lo dice todos los días a Marcos y llorando.
No sabía qué hacer, mi vida no tenía ningún sentido sin él, había perdido a mi hija y seguro que Ana se lo diría, seguro que se pondría más mal aún. Pasaron otras dos semanas y Ana me llamaba pero no se lo cogia, me pasaba los días llorando y encerrada, pensando en que mi vida ya no valía nada.
Al la mañana siguiente mi padre viene llorando y me dice que mi madre había muerto, que estaba en el dormitorio y no respiraba, fui corriendo y efectivamente había muerto. Ahora ya sí que mi vida había perdido todo el sentido, no tenía a mi pareja, ni a mi hija, ni a mi madre. Tras otras varias semanas llamé a Ana.
-Ana.
-Patri, por fin me devuelves las llamadas!
-Ana le dijiste a Héctor eso?
-Si Patri, Marcos se lo ha tenido que llevar al psicólogo, no te imaginas cómo está, no quiere hacer nada, a penas come, todo el día llorando.
-Ana mi madre murió hace unas semanas, y te llamaba para despedirme.
-Que?!? Patri tía lo siento, para despedirte? A donde vas?
-Quiero que sepas que has sido mi mejor amiga, como una hermana, que te quiero muchísimo y que siempre te voy a llevar en mi. Quiero que le digas a Héctor que lo amo, que esté bien y que viva su vida feliz, y que esté tranquilo, que he sido la mujer más feliz del mundo a su lado.
-Patri que vas a hacer??!?!?
*Colgué*
*Narra Ana*
Mierda! Me temía lo peor! Que era esa despedida? Me fui corriendo a la casa de Héctor donde estaban él y Marcos. Cuando llegué le conté a los dos la llamada de Patri.
-Héctor escúchame!! Patri me ha llamado despidiéndose! Me ha dicho que su madre murió hace unas semanas y ha llamado porque decía que era para despedirse!
-Qué? Vamos coge las llaves del coche corre!.-Dijo él levantándose rápido.
Fuimos a toda prisa a la cuidad de su madre, Héctor iba súper nervioso y casi llorando.
-Sabes dónde está la casa de su madre?
-Si, cuando me la presentó me quedé con el sitio.
Llegamos y llamemos a la puerta, nadie abría, yo llamé a Patri por teléfono y su teléfono sonaba dentro de la casa, Héctor con la oreja pegada a la puerta lo escuchó.

Un último adiós. #1 [Acabada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora