Un último adiós. #1 [Acabada]

Capítulo 30: Hasta nunca.

Fuimos Ana y yo a mi casa a coger algo de ropa para irme a su casa unos días y desaparecer de la vista de Héctor. Todavía no me lo podía creer, estaba totalmente en shock, llorando todo el tiempo cogí con Ana mi ropa y me volví a ir para su casa, dejé el móvil de Héctor allí para que cuando llegase lo viese. Cuando llegamos Ana me dió una pastilla para que me la tomase porque estaba de los nervios y tenía un dolor de cabeza impresionante.
Ana estuvo toda la tarde consolándome y animándome pero era inútil. Héctor me llamó 3 veces y Ana me decía que se lo comiese y hablase con él, pero no quería ni escucharlo, estaba muy muy mal, lo quería muchísimo y estaba por los suelos, no aguantaba eso, me iba a dar algo. A la cuarta vez que me lo llamó decidí cogerselo:
-Patri donde estás? Porque no me has llamado cuando has venido del médico?
-.....-No podía hablar porque estaba llorando mucho.
Ana me decía que le contestase y yo no podía.
-Patri? Que te pasa?
-Eres un gilipollas!! No te quiero ver más en la vida! Nunca!!.-Dije gritando y a la vez llorando.
-Pero Patri que te pasa?
-Que que me pasa? De verdad me lo preguntas?!?!?
-Porque me gritas así que he hecho?
-Héctor vete a la mierda! No me llames más, y que sepas que te quería de verdad, no me creo que me hayas hecho esto!!.-Le colgué llorando.
No me lo podía creer, hasta Ana se quedó flipando, encima se hacía el tonto, pero joder que lo había visto con mis propios ojos.
-Patri tía no llores más! Tienes que hablar bien con él y que te explique qué coño hacía con esa.
-Ana no quiero verlo, yo lo quiero Ana joder, porque me hace eso.
-No puedo creerme que Héctor haya hecho eso.
-Ana yo tampoco, me quiero morir de verdad.
-Patri no digas eso! Tienes que ser fuerte! Yo voy a estar contigo.
En realidad quería hablar con Héctor y verlo, pero no podía ser tonta, joder se estaba besando con otra, es que no podía parar de llorar.
No sabía si ir y hablar con él o quedarme a ca Ana, ella me decía que fuese a hablar con él, y decidí ir a casa y hablar con él.
En ese momento Héctor llamó a Ana por teléfono y Ana se lo cogio, ella se fue a otra habitación y me dijo que me esperase, y me hizo un gesto para que me tranquilizase, que todo iba a salir bien.
Pero, ¿por qué llamaba Héctor a Ana? Seguramente porque yo no lo dejaba hablar, además seguro que se lo contaría a Ana, por eso me esperé, me comían los nervios, desde que lo vi en el bar no había parado de llorar, lo quería, lo quería muchísimo y por encima de todo, pero esto no se lo iba a dejar pasar, no me creo que sea verdad, él me cuidaba, me mimaba, no entendía nada, me quería morir.