Capítulo 14: En cosas de dos, no caben tres.

592 38 0
                                    

Hice de comer para los dos, Héctor ya iba comiendo un poco mas, pero muy poco. Le dolía la cabeza y seguía teniendo flojera. Cuando acabamos de comer Héctor se tomó la pastilla y se durmió un rato para ver si se le quitaba el dolor de cabeza, me dijo que me fuese con él pero me tenía que ir al trabajo otra vez.
-De verdad prefieres irte al trabajo antes que quedarte aquí conmigo abrazada?.-Dijo con una sonrisa.
-De verdad quieres que me despida mi jefe?.-Le dije riendo.
-Por un día no va a pasar nada, dile que te encuentras mal esta tarde y ya esta. Venga quédate conmigo por fa.-Dijo con una de sus miradas.
Llame a mi jefe y le dije que me encontraba mal, que esta tarde no podría ir, y me dijo que no pasaba nada que no había ningún problema.
-Todavía tienes un hueco para mi?.-Le dije a Héctor riendo.
-Te quedas? Ven aquí conmigo. A que ahora estás más a gusto que trabajando?
-Mucho mejor así.-Dije dándole un beso.
-Oye Patri, me arrepiento de lo de esta mañana, de no habértelo contado antes, ha sido culpa mía.
-No te preocupes Héctor sabes que te quiero mucho, aunque hables medio dormido, te amo.-Dije dandole un abrazo y riendo.
-Bueno al menos medio dormido te doy abrazos y besos, el problema es que no me entero.-Dijo riéndose.
-Oye y que te pasó con la moto?
-Un coche se saltó un semáforo y me llevo por delante a mi y a otro que iba en moto también, yo salte por los aires y gracias al casco sigo aquí, se me salió el hombre y poco más, pero estuve varios días sin despertar.
-Lo debiste pasar fatal, ojalá te hubiese conocido antes.
-Y yo a ti, me has dado la tranquilidad que necesitaba, y el saber que te tengo conmigo me hace ser el hombre mas feliz del mundo.-Dijo dándome un beso.
Con eso que me dijo me acabó de enamorar, es que sentía una cosa por él que es imposible de explicar, imposible de sentir si no te enamoras de verdad.
Se quedó dormido por la pastilla que se tomó abrazado a mi, yo no podía estar más a gusto, tanto que me acabé durmiendo yo también.
Al rato sentí como alguien me besaba por la cara y me abrazaba fuerte.
-Estás medio dormido o despierto?.-Le dije yo riendo.
-Esta vez despierto lista.- Me dijo riendo.
-Héctor tengo que decirte una cosa.-Dije seria.
-Que pasa?.-Dijo él asustado.
-Que no te quiero, vete ahora mismo.-Dije aguantándome la risa.
-Está bien, si salgo por aquella puerta olvídate de más abrazos.
-No no no, no salgas!.-Dije yo gritándole.
-Tu lo has querido.-Dijo el yéndose.
Me levanté corriendo del sofá y lo abracé por detrás.
-Si te vas me muero aquí mismo.-Dije besándolo por el cuello.
-Sólo iba al baño, a que viene esto?.-Dijo riéndose.
-Serás tonto.-Dije yo dejándolo de abrazar y riendo.
-Pero me quieres mucho, tanto tanto como yo a ti no creo, pero un poquito si.-Dijo riéndose.
-Si eres mi vida como no te voy a querer.-Dije abrazándolo y dandole un beso.
-Que sepas que nunca nadie se va a interponer entre nosotros, y que siempre siempre voy a estar aquí para protegerte de todo y cuidarte, no quiero que se te olvide esto, que en cosas de dos, no caben tres.

Un último adiós. #1 [Acabada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora