Es la hora de comer. La fatidica hora de suplicio. Miro el plato lleno de verduras y luego miro la manzana y el vaso de agua. Mi cara debe ser la de un completo disgusto y es que estoy harto de esto pero...peor es lo que viene después...
Si no como, la comida entrará de otra forma que es bien dolorosa...me tendrán que sedar, dormirme y mientras por tubos meterme la comida...
Malditos torturadores de médicos...¿qué más les da que no coma?
¡Dejádme en paz!
Estoy solo en la mesa y tengo ganas de tirar todo lo que hay sobre ella pero me contengo. De repente noto movimiento, un cuerpo enfundado en un traje de enfermero viene hacia a mi. Oh no...primer aviso...
Me agacho con los codos apoyados y miro concentrado la comida, como si la oliese, escondo mi mirada bajo mis manos sujetas en mi frente. No quiero mirarle pero algo en él me llama la atención y son sus manos. Sus dedos repiquetean encima de la superficie. Esas manos las conozco perfectamente, muchas noches las he devorado con los ojos.
Alzo la mirada y veo a Kai que me mira con los ojos achicados por una tenue sonrisa.
-Kai...-susurro sorprendido, comienzo a sonreír pero entonces Kai me chista.
-Tienes que comer así que come...quiero que estes fuerte para lo que luego te tengo preparado...- me ordena pacífico. Yo le miro contrariado pero la sonrisa de Kai no desaparece en sus labios y alzado las cejas mira mi plato. Mueve la barbilla señalándomelo.
Vuelvo a enfrentarme a mis peores adversarios...
Las judías verdes con su aliados el tomate y el huevo...es una ensalada...está frío y siento cierto asco pero...Kai ha venido a apoyarme, quiere que coma...quiere que esté fuerte para él...me va a dar una sorpresa y estoy que salto de la felicidad.
Respiro hondo e inco el tenedor y me meto en la boca un montón de todo.
Kai se ríe mostrando sus bonita sonrisa. Yo parezco un hamster comiendo a dos carrillos pero...no me importa...
Aun siendo la persona más imperfecta del mundo quiero a alguien que dentro de sus defectos es la persona más bella del mundo para mi...
Así es el amor. Imperfecto pero bello al mismo tiempo.
