Mi Futura Boda

¿Mi Boda?

Después de un largo día de trabajo me digne a ir a mi casa, ya vivía sola así que no tenía ningún problema.

Cuando llegue a mi hogar, se encontraban mis padres sentados en un sillón.

— Hola papá, hola mamá - dije confundía por su presencia.

–Karlita hola te esperábamos. - dijo papá

—¿Cómo entraron?

—¿no recuerdas que nos diste una llave? - contesto mamá

—ahora que lo dices, sí ya recordé- en ese momento me senté en un sillón que estaba enfrente.

— hija queremos hablar de un tema serio contigo. - dijo papá mirándome a los ojos.

—¿ya haz pensado con quien te vas a casar? ¿tienes ya un prometido?

— saben es mejor que no hablemos del tema. - agache mi cabeza

— lo sabía - dejo de mirarme

—no pueden entender que yo quiero vivir sola. - dije molesta y me pare del sillón.

— mira lo hacemos para que seas feliz. - dijo mamá mirándome

—no queremos verte sola, debes de tener alguien a tu lado.... - interrumpido.

—de verdad no quiero hablar del tema- sería.
—hay Karlita
—no me llames así mamá tengo 25 años - pose una mano sobre mi cabeza y caminaba de izquierda a derecha.

—no se porque te pones así, solo lo hacemos por ti.

— ¿por mi? - quite mi mano de mi cabeza.

—si.

— ¿POR MÍ ? - repetí pero esta vez era diferente por grité.

—Karla no debes gritarnos somos tus padres y debes de tener respeto hacia nosotros. - esta vez ella me gritó.

— bueno entonces ¿nada más vinieron a decirme que no me puedo quedar soltera? - dije más calmada.

— no, tenemos que decirte algo.

— ¿que sucede? - me puse sería y volví a sentarme en el sillón.

—como te dijimos, no nos gusta verte sola, así que.. - interrumpida.

— te arreglamos un matrimonio.

— que buena broma - empecé a reír, aunque mi subconsciente decía *que sea broma *.

—no es una broma - odie escuchar eso.

—te casarás dentro de 5 meses con John Gracie.

— con cualquiera menos con él - reproche aunque no lo conozco.

— ¿porque?

— pues lo conocí hace 5 años y no me cayo muy bien - mentí, jamás había escuchado de el.

—mentira, el estudio en Francia desde hace 10 años, por lo tanto no puedes conocerlo - molesto.

—bien la verdad no lo conozco y nunca había escuchado su nombre, no pueden obligarme a casarme de alguien que no tengo el placer de conocer.

—pues ya lo hicimos. - se levantó del sofá para irse.

— por favor amor piénsalo - también se levantó.

Cuando ya estaban en la puerta mi papá se despidió de mi con la siguiente frase.

— mañana tienes una cita con el, a las 9:30pm. - se fue

— si ajá. - cerré la puerta.

Corrí hacia mi habitación y me encerré (aunque no es muy lógico porque como dije vivo sola), y me puse a pensar sobre mi boda, como se atrevían a querer hacer conmigo lo que se les pareciera, tal vez me hayan manipulado alguna vez para lavar los trastes o algo por el estilo, pero esta vez si se pasaron, ¿casarme?, realmente estaban locos, yo no iba a casarme.

Salí de mi habitación, me senté en uno de los sillones, prendí la televisión, no estaba poniendo atención al programa así que mejor la apage, después me puse a recordar como Peter había roto mi corazón al único que ame, al único que me entrege en cuerpo y alma, para que me saliera con el típico "no eres tu, soy yo".

Desperté, no puedo creer que me quede dormida de un momento a otro y menos en un simple sofá, me levante a ver la hora, eran las 8, ya se me había hecho tarde, me cambie lo más rápido que pude, subí a mi auto y a toda velocidad llegue a mi trabajo.

— hola Licenciada Karla.
—buenos días Julie (es mi secretaria) - dije con cara de pocos amigos

—¿puedo preguntarle una cosa?

— ya estas preguntando - dije enojada

— ¿porque esta tan enojada hoy?

— es que me voy a casar - suspire.

— ¿eso es malo? - extrañada

— si, porque ni siquiera conozco a mi prometido, es un conocido de mis padres. - dije más enojada.

—pero eso no esta bien licenciada.

— lo se, intenta decirle a ellos, que no comprenden.

— si se casa debería ser por amor - ("amor" la palabra que más odio en el mundo)

— no vuelvas a mencionar esa palabra si estoy cerca - dije mirándola amenazante, mientras ella retrocedía.
— por supuesto - nerviosa, se fue.

Es que no comprendo a mis padres, creo que quieren dominar mi vida, primero me hacen volverme abogada para que tenga un buen trabajó, después me obligan a entrar en el gobierno, y como último me quieren casar, pero ¿que quieren de mi?, es lo único que me gustaría saber, les he cumplido con todo que me piden y cada vez quieren más. Una cosa que me hayan dado la vida mientras que otra es que la controlen. Entró un joven y me hizo salir de mis pensamientos.

—hola mucho gusto, ¿usted es la licenciada Karla? - dijo amable

— por supuesto ¿que necesita?

— necesito saber que papeles requiero para mi boda.

— bueno pues lo que necesita es.... - interrumpida.

— lo siento me llaman por teléfono - saco su celular que estaba vibrando.

La verdad era un joven como de 27 años, de cabello castaño y ojos marrones, era muy lindo, lastima que se iba a casar, me pregunto ¿quien será la afortunada?. Después de un rato vi que salió corriendo, bueno el ni siquiera me dijo su nombre, seguí con mi trabajo y sentí que mi celular vibraba, lo sostuve un momento era un mensaje de mis padres donde me recordaban que tenia una cita hoy.

Ya casi era la hora de mi cita y yo apenas había llegado a casa, no pensaba ir pero tenía que ir, me arregle un poco y me puse el primer vestido que encontré...