Mi Futura Boda

Recuerdos

Ya habían pasado dos días,  mi mamá junto con la señora Elizabeth pasaron por mi después del trabajo ese día había salido temprano.

— Hola querida nuera - dijo la señora Elizabeth.

— Hola pequeña -  dijo mi madre.

— Ya no soy una niña,  soy lo suficientemente adulta como para tomar mis decisiones - dije molesta.

— ¿Tanto te molesta que te diga pequeña? -  dijo mi madre.

— No es eso,  solo que no logró comprender porque me comprometieron con John,  si ninguno de los dos queríamos - dije

— John es un gran chico,  tal vez no te ha dicho se título de Arquitecto,  es tierno,  amable y yo diría que guapo - dijo su madre.

— Lo se,  el es un chico muy atractivo con todo lo que usted dijo,  pero no se por que se les ocurrió que nosotros quisiéramos casarnos - dije molesta.

— Pues hace dos días no se veía que les molestara -  dijo Elizabeth.

— Vámonos ya,  ahorita en el auto pueden seguir hablando de eso - interrumpió mi madre

Subimos al auto,  no dijimos ni una palabra hasta que íbamos en medio camino.

— Disculpe señora,  pero yo no quiero casarme, una vez me hirieron el alma y desde ese día no se pudo componer,  tal vez su hijo sea "perfecto"  pero no es para mi -  dije sería.

— Nadie es perfecto,  entiendo que alguien te haya lastimado,  pero no por eso debes hacer lo mismo a John -  dijo la señora Elizabeth.

— Pero quiero que entiendan que ni el, ni yo sentimos amor uno para el otro - dije molesta.

— No rechaces tus sentimientos,  se que tu lo amas y el a ti - decía Elizabeth.

— Tal vez yo lo amo pero el lo único que quiere es su estúpido restaurante,  por ahora me casare pero cuando pueda me voy a divorciar - dije sin pensar.

— Bueno al principio mi marido y yo decidimos darle aquel restaurante con tal de que se casarán,  pero acaso no recuerdas los que se prometieron no recuerdas a tu primer amor.  -  dijo Elizabeth.

— Recordar ¿qué? -  dije

— Tu primer amor,  debes recordarlo - dijo mi madre.

¿No era Peter mi primer amor?, ¿Qué tiene mi primer amor que ver con John en eso?,  ¿Hubo alguien antes que Peter? Muchas preguntas rodeaban mi mente,  pero intentaba calmarme.

No se como pero el dolor en mi cabeza hizo que quedará inconsciente.

Abrí lentamente mis ojos,  vi a una joven llorando,  tenía como 15 años,  se me hacia familiar,  comencé a acercarme pero al parecer no me veía.  La mire atentamente me lleve una gran sorpresa al notar que esa joven era yo,  pero no me recordaba llorando a esa edad. De pronto un chico parecido a John se le acercó,  le dio un pequeño beso en la frente y un gran abrazo, la joven sólo correspondía el abrazo mientras susurraba algo. El chico se separó del abrazo y comenzó a alejarse la chica intentaba perseguirlo pero no podía alcanzarlo.

Empecé a recordar,  ese día le había prometido a John qué me casaría con el cuando regresará de un largo viaje, éramos algo jóvenes pero  sabíamos lo que sentimos.

Desperté algo  agitada,  mi madre se había estacionado e intentaba hacer qué reaccionará junto con la señora Elizabeth.

— ¿Estás bien? -  dijo mi madre preocupada.

— Si,  estoy bien - dije mirándolas.

— ¿Recordaste algo? - dijo mi suegra.

— Mi primer amor fue Peter,  pero después me traicionó,  no entiendo que quieren llegar con ésto - mentí.

— Ese no fue tu primer amor,  por favor quiero que recuerdes - decía Elizabeth.

— Necesito hablar con John,  en serio que lo necesito - dije entre susurros.

— Pues si quieres habla con él por  teléfono y has qué tengan una cita - dijo Elizabeth.

Empecé a marcar, al parecer estaba ocupado,  estaba nerviosa y había decidido colgar.

— Hola ¿quien hablan?
—Hola John habla Karla.
— Ah Karla,  ¿quieres decirme que te casaras conmigo aunque no me ames?
— Prefiero verte ahora, estoy con nuestras madres para ir a comprar el vestido pero necesito hablar contigo en persona - dije algo tensa.
— Esta bien nos vemos en el restaurante "Francie"  a las 6
—Pero llega puntual - reí.
— Esta bien llegaré puntual,  tu también hazlo.

Sin despedirse colgó,  la verdad no estaba molesta,  habían pasado apenas dos días que lo rechacé, entendía su frustración.

— ¿Y bien? - me miraron ambas.

— Tengo una cita con él,  esta tarde - suspire.

De ahí en adelante ya no hablamos sobre el tema,  bajamos en una tienda muy elegante donde había cientos de vestidos,  tanto de boda como de 15 años.

Empecé a mirar,  ninguno llamaba mi atención sentía que eran demasiado extravagantes,  yo necesitaba algo simple. 

Mis ojos lograron ver una vestido que sentía perfecto para mi,  la falda era lisa y llegaba al ras del suelo,  la parte de arriba tenia un adorno de en forma de tulipán* en la parte del corazón qué no abarcaba mucho espacio, tenía un hermoso velo,  era perfecto.

— Quiero probarme ese - señale aquel vestido.

No tardaron mucho las trabajadoras en ayudar a que me lo probará,  sentía qué era diseñando para mi.

— También prueba este -  decía mi suegra.

— Tal vez este - decía mi madre.

Me provee también aquellos vestidos pero nadie me quitaba de la mente el  primero.

— ¿Entonces cuál te vas a llevar?  - dijeron al mismo tiempo.

— El que tiene el tulipán -  sonreí.

Ellas también sonrieron y fuimos a pagarlo,  mi madre se llevó la caja donde se encontraba el vestido.

— Ya es hora de que vayas con John - dijo mi madre.

La verdad ya no me acordaba  que me había citado con él,  tome mi bolso,  me subí a un taxi y me dirigí al restaurante.  Cuando llegue lo vi sentado esperándome..

— Hola John -  me acerque.

— Hola Karla -  puso su mirada en mi.

— ¿Cómo estás? - dije sin saber que decir.

— No tengo tiempo para saludos formales ve al grano - dijo molesto.

— ¿Recuerdas a tu primer amor? - dije sería.

— Si la conocí en Francia - dijo confundido.

—¿No hubo alguien antes que ella? - no se que esperará qué respondiera.

— Ahora que lo dices,  conocí a una chica antes de mi viajé,  no recuerdo su nombre pero le prometí casarme con ella - dijo pensando.

— Lo sabía -  grite

—¿Sabias que? -  dijo asustado.

— Qué si  me quiero casar contigo -  sonreí.

— Espera ¿esa joven eras tu? -  dijo aun sorprendido.

— Bueno no tenía ni idea, pero en la mañana caí inconsciente y vi todo,  solo quería saber si ese joven por el que lloraba eras tú.

— Entonces ¿aceptas casarte conmigo? -  me miró y me enseñó el anillo.

— Si acepto -  puso el anillo en mi dedo.

Nota:

*Tulipán = amor eterno