Casualidades de la vida.

ｃｉｔａ.

No hablamos más desde aquella confesión estaba enojada pero triste, cuando llegue a casa busque en Internet que tan famoso era como todos decían, y claro, mayores logros económicos en su empresa, guapo, anteriormente casado con una historia un poco tormentosa. Ahora las piezas encajaban todo este tiempo a ese pequeño que creía que era su hermano o tal vez sobrino, es su hijo y el esta divorciado, su esposa lo dejo años atrás.

Estaba decidida en ir a esa cita y resolver todas mis dudas quería saber todo.

- Papá mañana saldré a algún pub con Abby.-Dijo y el sólo asintió.- Así que mañana después de tu trabajo te vas a la casa y no pasas por mi.

-¿No irás con Ian cierto?

-¿Qué? No, después de lo que me dijiste.-Mentí.

-Okay.

***

22:35. Del siguiente día.

Estaba afuera de la Uní hablando con Abby la cual me daba ánimos para salir con Ian y poder resolver mis dudas.

Este día camino a la Universidad, Ian me había saludado, pero yo ni lo mire sólo estaba sumergida en mis pensamientos de como reaccionaria hacia mis preguntas.

Abby estaba igual o más impactada acerca de la confesión que me dio mi padre sobre Ian, pero Abby insistía en que fuera y le preguntará.

--Tranquila, yo te cubro, pero no olvides darme todos los detalles cuando estés en casa ya sabes, Diviértete.- Me reí y asenti sabía lo chismosa que muchas veces puede ser Abby.

Escucho la bocina resonar de un auto y las dos observamos para poder ver a Ian bajar de su auto con atuendo completamente relajado y listo para divertirse.

Me despedí de Abby y me acerqué a paso lento a Ian.

-Hola.-- Dijo y beso mi mejilla.-¿Estas lista?

- Sí.-Sonreí, creo que noto mi sonrisa falsa, la verdad estaba incómoda con todo lo que me enteré, pero me gustaba y me daba intriga seguir conociendo más de el.

-¿Estas bien?

-Sí, no te preocupes.

Muchas veces puedo ser una mujer de pocas palabras, como también puedo ser muy parlanchina, estaba completamente perdía del espacio y tiempo, estaba siendo cortante y lo sabía por qué notaba lo incómodo que se encontraba el, ante mi actuar.

Nos dirigimos hacia su auto, el abrió la puerta para mi y me dejo entrar, el rodeo el auto y subió por su lado.

En la radio sonaba Stressed Out de 21 pilots, yo comencé a tararear la canción era muy fan de 21 Pilots.

-¿Te gusta?

-Obvio, esta canción me hace sentir que los años pasan rápido y la rutina cambia tener que hacerte cargo de los deberes del trabajo y estar constante bajo presión, y no sabes cuanto extraño relajarme o distraerme como cuando niños.-Dije y le di una sonrisa cálida.

--Coincido contigo, y pienso que la sociedad en la que vivimos nos hace vivir bajo esa constante presión en la que vivimos, es complicado, pero siempre hay algo aunque mínimo sea que te puede animar a continuar.-- Dijo y me devolvió la sonrisa, no saben cuántas noches soñé con esto, como me derretia por esa sonrisa y ahora tenerla tan cerca de mi.