Capitulo 1

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Oscuridad, lamentos, quejidos, dolor, angustia y un fuerte olor a azufre es lo que habita en el infierno. Mueres una y otra vez, somos Demonios y este es nuestro hogar.

En la cima de la montaña cada primavera cae un Ángel desterrado o un Ángel caído.

Nos regimos por lo que creemos es nuestra ley, sin muerte y maldad todo sería muy simple. Los Demonios estamos en la categoría más baja en el cielo, pero más alta en el infierno.

Los Arcángeles son criaturas soberbias con un aire de superioridad, tienen reglas:

1. No hablas con humanos.
2. Esta prohibido estar en el mismo sitio que un Demonio.
3. La ley es lo que prevalece.
4. No ayudas a los Demonios.
5. Matas a cuanto Demonio puedas.

Esas reglas es lo que nos diferencia. Nosotros sólo tenemos una sola regla.

1. No hay regla.

Con el pasar de los años los Demonios nos hemos humanizado más, creemos que los humanos tienen en su interior lo que los Demonios tanto anhelan.

La teoría es que cuando nacimos cada ser que habita en el mundo tiene un alma gemela, los Arcángeles se niegan a aceptar tal realidad. Por desobedecer a Dios este nos desterró y nos obligó a permanecer bajo tierra. Conforme hivan pasando los años nos dimos de cuenta que había esperanza para nosotros.
Un humano siempre será la preferencia de Dios.
Fue cuando nos dimos de cuenta que algunos humanos escondían muy dentro de ellos lo que nosotros buscábamos. Nuestra alma o nuestro corazón.

Sentir nos hace más humanos y menos monstruos. Los Arcángeles prohíben a toda costa que un Demonio se acerque a un humano.

Aveces me preguntó si los Arcángeles en realidad son seres tan angelicales como quieren hacer creer.

Yo soy Luzbel, soy el Arcángel que Dios desterró del Cielo y lo condenó toda su eternidad a un infierno que cada día es más fuerte.

Como el Demonio que manda el infierno necesitó a una reina a mi lado, mi reina debe ser una humana que lleve mi mitad. Todos impedirán que mis Demonios la toquen pero después de todo yo también soy un Dios y uno muy vengativo...


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- Nos contarías un cuento mami - Mire a Laisan y Sonreí.

- Hace mucho tiempo en el cielo habitaban todo tipo de ángeles, era un lugar tranquilo, a los pies de Dios cada mañana se inclinaba el Arcángel Luzbel. La creación más perfecta que Dios había creado. Luzbel era obediente pero sentía diferente al resto de los Arcángeles. Cada que podía le preguntaba a Dios por que prefería a los humanos antes que a los Arcángeles, en respuesta Dios sonrió y contestó. No cree a los Arcángeles para que sintieran envidia, fue la única contestación que Dios le dio, Luzbel no comprendía como su padre, no podía quererlos, Con el pasar de los días Luzbel, se sentía diferente, cada día notaba que Dios y los Ángeles que tenía a su alrededor eran falsos. Luzbel sabía que su padre si amaba a los humanos por sobre todas las cosas. Creyéndose el más poderoso bajo a la tierra sin el permiso de su padre y camino entre los humanos.
Por un error que había cometido Luzbel fue a juicio y quedó desterrado del Cielo. Dios lo condenó a las sombras Luzbel con rencor creó su propio reino muchos ángeles lo siguieron y el se proclamó Dios de la tierra. Aún cuando todos caminan tranquilamente, en el cielo aun hay guerra...

- Mami porque Dios no lo queria - mire a Airan.

- Cariño la única razón sólo la sabe el, quizá los quiere pero el amor es un sentimiento que Dios no les dio a ellos.

- Luzbel sigue siendo un Arcángel .

- El nunca dejara de serlo mi amor, pero nunca más podrá volver a estar en el cielo.

Alma Oscura... #Wattys2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora