Miraculous LadyIce (Jelsa)

"Akuma"

Los nuevos poseídos empezaron a acumularse e incrementar en número hasta que llegaron a formar incluso más de la mitad de los adolescentes presentes en el baile. Miré a los chicos y ellos comprendieron lo que ocurría, se notaba por el miedo en sus ojos. Ya estaban acostumbrados a la aparición de Akumas en la ciudad pero seguía siendo terrorífico para todos. Corrimos a escondernos en un lugar seguro y en el camino logramos encontrarnos con Anna quien por suerte, también se había salvado de la "Akumatisación" masiva. 

-¡¿Esto es normal aquí en París?! ¡Porque de haberlo sabido lo hubiera considerado antes de venirme de Noruega!- dijo algo, o bueno, bastante alterada mientras corría a nuestro lado. 

-Jajaja ¡Es el precio por vivir en una ciudad tan genial!- gritó Hiccup desde el otro lado de la calle. Mérida lo miró con mala cara y luego contestó.

-Tranquila, ya vendrán LadyIce y Jack Frost para salvarnos, no debes preocuparte, todo estará bien-

-¡Lo sé! Solo espero acostumbrarme a esto...- finalizó Anna, y justo después doblamos por una calle que no tenía salida. Todos nos miramos y decidimos que ese lugar estaría bien, siempre y cuando no hiciéramos mucho ruido y no llamáramos la atención de ningún Akuma.

-¿Dónde esta Tadashi?- 

Todos comenzamos a buscarlo con la mirada y efectivamente no estaba, Anna estaba a punto de salir del escondite para buscarlo cuando la detuve por la muñeca.

-Quédate aquí, yo iré a buscarlo-

-¿¿Por qué?? ¡Yo también puedo!-

-No lo dudo, pero, ¿viste que ese tal Hans fue el que comenzó todo esto? Por lo que nos dijo Tadashi no te conviene que te encuentre ¿verdad...? Mejor quédate aquí, yo lo traeré sano y salvo, no te preocupes.- Ella vaciló por un instante pero luego aceptó.

Cuando ya había salido corriendo para transformarme en Jack Frost me llevé la enorme sorpresa de ver a Mérida junto a mí corriendo a toda velocidad.

-¡¿Qué haces?!-

-¡Voy contigo, por supuesto!-

-¿Hiccup estuvo de acuerdo con esto..?-

-¿Por qué crées que debería estarlo? ¡No soy su mascota ni nada por el estilo!-

-¡Pero si algo te ocurre, él me mata! Sabes eso ¿¿Verdad??-

-¡No voy a dejar a Elsa sola!-

Maldición, Elsa. Ella aun estaba en el baño, no podia dejarla ahi sola, pero tambien debía derrotar a Hans. Rayos.

Asentí con la cabeza y me separé de Mérida.

-¡¿A dónde vas?!-

-¡Dejo a Elsa en tus manos! Yo iré por Tadashi, ¡Ocúltense bien, volveré enseguida!-

Corrí lo más rápido que pude pero cuando por fin me estaba acercando al lugar del origen, vi a Tadashi siendo atacado por un Akuma. Así jamás podría transformarme...

-¡¡Tadashi!!-

Corrí hacia él y lo salvé del agarre de la chica gótica que lo tenía aprisionado. En respuesta, esta me gruñó y se transformó en un murciélago para luego comenzar a atacarnos a ambos con sus dientes.

-¡Hay que correr! ¡Esta chica es persistente!- gritó Tadashi y ambos salimos corriendo y chocando con un montón de gente que se cruzaba en nuestro camino, de repente, algo agarró mi pie haciéndome caer entre la multitud, Tadashi se detuvo a ayudarme pero fuimos acorralados por un montón de Akumas con apariencias aterradoras, la continuación del ataque a la casa embrujada estaba frente a nosotros una vez más. Una momia, un lobo, un zombie y una masa sin forma de color verde se acercaban listos para atacar cuando un rayo de hielo se interpuso entre ellos deslumbrándonos a todos. Levanté la vista y vi a LadyIce cruzando por los aires. Por un momento nuestras miradas se cruzaron, vi como un rubor se apoderó de sus mejillas y quedé cautivado, seguramente recordaba aquel "beso" en mi habitación con la misma claridad que yo, pero corrí mi mirada de sus ojos en cuanto una imagen de Elsa cruzó por mi mente. "Aclara tu mente Jackson" me dije a mi mismo. Peri tenía razón, no era correcto mezclar los asuntos del corazón con el deber, por eso el tener una relación con Lady Ice haría las cosas mucho más complicadas, pero no era tiempo de pensar en eso, ahora debía transformarme para ir a ayudarla pero no podría mientras tuviera a Tadashi y todos esos Akumas con sus ojos sobre mí.

-¡¡Lucky Charm!!- LadyIce lanzó un conjuro al cielo y vi como el objeto que nos ayudaría a salvarnos caía sobre sus manos. Me sorprendió que activara dicho conjuro tan rápido, no solía hacerlo y aquello solo confirmaba mi sospecha de que las cosas estaban cada vez más difíciles. Si antes ya era complicado vencer a un Akuma, ahora había cientos y cientos a nuestro al rededor, debía darme prisa, pero para eso tendría que hacer algo que no me gustaba para nada...

-Tadashi, necesito que vayas a buscar a Elsa, aún esta en el baño con Mérida, huye mientras distraigo a estos tipos...-

-¡¿Estas loco?! ¡Van a matarte!-

-¡Sólo hazlo!- Grité serio. Vi como vaciló por unos instantes, pero luego asintió con la cabeza y salió disparado mientras otros de los dos Akumas lo seguían, entonces llamé su atención con piedras que les lancé del suelo y corrí en dirección opuesta a Tadashi; ellos me siguieron y entonces LadyIce se interpuso entre nosotros lanzando ferozmente sus rayos de hielo protegiéndome la espalda. Me detuve por un momento pero ella me gritó que no me detuviera y entonces continué mi camino lo mas rapido que pude.
Sin dudarlo llame a Peri y active mi transformación. En ese mismo instante, un grito de LadyIce a lo lejos me hizo voltear nuevamente y pude ver como era atacada por detrás con una navaja. 

-¡¡¡Lady!!!- Volé y me abalancé contra el dueño del arma contra el suelo.

-Ja-Jack, aléjate de él...vete...!- Escuché decir a Lady ice mientras lo golpeaba frenético,  pero no le hice caso, mi cuerpo no escuchaba, estaba totalmente sumido por el odio, ese tal Hans me las pagaría...
-¡¡¡Cómo te atrevas a tocarla otra vez te rompo la cabeza me oyes!?!!-

-¡Jack!-

El idiota comenzó a reírse como loco mientras un hilo de sangre salía por su boca. Apreté más su cabeza contra el suelo y entonces paró de reír y en su lugar comenzó a toser frenético. 

-Eso es, déjate llevar por el odio, eso es lo que te traerá victoria al final...- dijo el pelirrojo  entre dientes.

-¡¡Cállate!!-

-¡Jack, ya basta!- me grito Ladyice.- Él tiene razón, solo te estas perdiendo a ti mismo en el odio..!- Al oír esto me calmé un poco y volteé mi cabeza hacia ella. Estaba golpeada y sus manos cubrían la zona en la que había sido atacada, podría apostar a que mucha sangre salía de ahí pero respiré hondo y haciendo caso a sus palabras me alejé de Hans y caminé hacia ella. Cuando estaba a punto de tocarla un grito de ella me sorprendió y vi como Hans se abalanzaba sobre mí con algo en la mano. Sólo pude ver el rostro de LadyIce horrorizado frente a mí, luego una mariposa, y después todo se oscureció.