~Peligroso a sabiendas~

Algo llamado victoria...

Por fin era Sábado, hoy descargaria adrenalina corriendo y me alejaria de toda la mierda durante un rato.

Salgo de casa y ando hasta el almacén avandonado lleno de escombros del incendio de hace cuatro años. Allí escondia a Stephan, el ferrari con el que correria. Stephan era de un color rojo intenso con asientos de cuero y doscientos treinta caballos. De cero a cien en siete segundos y medio. Era increiblemente hermoso y... rápido.

Apuro el paso para llegar lo antes posible. En cuestión de diez minutos ya estoy vestida con el mono rojo de cuero y con la bolsa con tres mil en efectivo.

Al girar las llaves en el contacto, el rugido del motor retumba en mis oidos y por inercia sonrio. Acomodo el pelo y me pongo el casco. La puerta chirria al abrirse y salgo disparada.

Algunos a los que considero "amigos" me dicen que hay alguien interesado en correr contra mi. Asiento mirando a través del plastico del casco. Aquí todos tienen expectativas, algunas de ellas demasiado peligrosas como para ser dichas, otras son tan simples que no valen la pena, pero yo no me meto en ello y ellos no se meten en lo mio. Simple y fácil. Miro mi mano y hago girar el anillo con la palabra "Poder" . Ese anillo lo tienen todos los competidores del circuito, indican el porqué empezaron a correr.

Un chico de pelo largo y marrón extiende su mano hacia mi dirección y sonrie en cuanto se la acepto.

-Me llamo Unknow y qukero correr contra tí.-Asentí.-¿Nunca te quitas el casco...?

-Harris.- La voz me tembló. Genial, ahora aparentaba ser débil. Negué con la cabeza, por miedo a que esta me fallara.

-¿Por qué no te lo quitas y me dejas ver tu cara?-Su mano intenta agarrar el plastico pero la aparto.-He oido que eres tan fea que nos petrificarás.-Asiento.

-Yo tambien lo he oido y tambien he oido...-Paseé mi mirada por su brazo. Tenia la chaqueta negra remangada mostrando sus tatuajes, sin darme cuenta, miro su anillo "Amor" y sin querer me encuentro preguntandome... ¿Amor a qué? ¿A quien?

-¿Que has oido?-Pregunta sacándome del trance.

-Que quieres perder contra mi.- Sonrie y en ese intante caigo en lo hermoso que es. Tiene hoyuelos a cada lado y puedo notar que tiene los ojos claros pero no sé bien de que color. Niega divertido y se acerca un poquito.

-Quiero ganarte a tí.

-Pues a ello chico "Unknow"-Gesticulo con los dedos.-Tres mil en efectivo.-Asiente y me guiña un ojo.

Me giro y me dirijo al coche. Entro y sin más enciendo el motor y aliéo el coche con el murcielago gris de Unknow. Una puta se pone frente a nosotros y ondea la bandera roja entre sus manos.

1...2...3...Mi pie se hunde en el acelerador mientras cambio la marcha y salgo disparada hacia delante. El cuenta quilómetros va en aumento, 130km/h, 145km/h,160km/h, 190km/h. Sé que los badenes me harán salir disparada como no frene un poco, así que lo hago pero acelero justo antes de la curva, intento equilibrar el coche en las cuatro ruedas. Quedan quinientos metros y pulso el turbo. El morro del coche de Unknow desaparece de mi lado y se posiciona en el espejo retrovisor. Lo tengo justo detrás. Acelero un poco más y la aguja llega a los 210km/h . La línea de llegada me hace salir victoriosa.

Freno haciendo que el coche derrape y quede enfrete del murcielado. Sale del coche y cierra de un portazo. Está enfadado. Se nota. Bajo la ventanilla cuando se acerca y me lanza el fajo de miles de billetas y agarro su mano antes de que se gire.

-Esto...-Señalo entre nosotros.-Es algo llamado victoria.-Le guiño un ojo y me doy cuenta de que tengo el casco puesto. Es que soy gilipollas.