6 de enero, el día en que las familias se reúnen a comer las dichosas roscas y los niños esperan que loa Reyes magos les traigan sus regalos. Y por ser un día especial, decidi comprarte un obsequio debía ser algo especial, algo que tu y yo compartieramos, no queria que fuese algo convencional, debía ser diferente... Estaba caminando por las calles de la ciudad junto con mi abuela y la vi, era el regalo perfecto para nosotros; tal vez sería algo cursi pero sabía que te encantaría tanto como a mi.
Eran aproximadamente las 7 de la tarde, y habiamos quedado para vernos esa tarde, tu también jabias comprado algo para mi. Abrí la puerta y ahí estabas tu, tan atractivo para mi, como siempre. Salí y te di tu regalo, qie era una sudadera del gato sonriente, ese que sale en Alicia y el país de las maravillas, y también me compré una. Tu, escondido detrás de tu espalda traías un disco para mi, el disco en el cual la canción con la que me enamoraste venía, Sangre Fría de Pxndx.
No pudo ser algo tan especial.