El chico de la librería.

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Después de unos diez minutos de viaje en el auto, veo por la ventana que paramos frente a un lugar con muchas decoraciones y muchos colores, se leía "Freedom on the books" en un gran cartel con luces.

- Bien, creo que ya llegamos.- dice mi mamá una vez que para el auto, sonrío entusiasmada y bajo corriendo del auto.-

- ¡Clare! ¡Espera!.- grita asustada, pero demasiado tarde, porque yo ya estoy dentro de la librería mirando alrededor fascinada la increíble decoración. Me acerco hacia unos estantes y leo varios títulos y autores.

Agarro un libro y miro curiosa la portada , la cual tiene a una niña de mi edad sonriendo; estaba por abrir el libro cuando una mujer se acerca y me mira curiosa.

- Hola, soy Anne, ¿En que puedo ayudarte?.- me pregunta sonriente. Miro con atención sus ojos y noto que son de un color verde, pero no el verde normal, sino un verde esmeralda.

- Usted tiene unos ojos como los de mi prima.

Ríe y mira con curiosidad el libro que tengo  en la mano.

- ¿Ana Frank?

Asiento con la cabeza.

- Es un gran libro, te lo aseguro.- señala un espacio con sillas.- Ahí podes sentarte a darle una ojeada a algunos libros.

Un hombre la llama, ella se disculpa y se va. Levanto los hombro y sigo buscando algún libro que me interese. A los pocos segundos aparece mi mamá, me da un sermón de que me puede pasar lo que sea  y luego se va a la sección de Romance.

Al cabo de un rato, voy a la parte de Policiales. Tengo una rara obsesión con las historias policiales, en especial con los de Sidney Sheldon; mi mamá me había hablado de un libro que, según ella, estaba buenísimo... ¿Cómo se llamaba?... ¡Ah, ya sé! Los mejores planes, sí, así se llamaba.

Los mejores planes, los mejores planes, los mejor... ¡Bingo!

Sonrío al verlo y estiro la mano para agarrarlo, pero me quedo helada al sentir la mano de otra persona encima de la mira.

- Oh, lo siento, yo sólo...

Me giro para verlo y quedo boquiabierta, ¡Madre mía! ¡Está re bueno!

- Yo...yo no... yo...

¡Clare! No tartamudees, te ves como una estúpida, ¡reacciona! ¡te está dando el libro!

Reacciono y lo agarro sonrojada.

- Gracias.

Le sonrío y el me devuelve la sonrisa.

- No es nada, solo quería darle una ojeada.

¡Que linda sonrisa!

- Por cierto, soy Tristan.

Me extiende la mano, la agarro y la sacudo 3 veces.

- Soy Clare.