Marginada.

Días y más días.

Hoy se cumplen 5 días de la ausencia se Marleme, el dolor de ayer no fue nada agradable creo que me da cuando me preocupo mucho. He hablado con mi mamá por la noche y me ha dejado ir a la casa de Marleme esta tarde.
Ya estoy sentada en mi butaca y me viene un recuerdo de Marleme:
—¿Te gusta muchos Mario, verdad?— menciona Marleme
—Em... Creo que no te debo de decir.
—No te preocupes es más que obvio, Gaby me contó que cortaron por dos razones y una es por ti ¿Acaso no te da a alegría? Y por cierto mi nombre es Marleme.
—Mm... Si, es lindo y si no es indiscreción ¿Cuál fue la otra causa de la ruptura?
—Ooh ... Te diré no soy mala pero primero debes de ser mi amiga y no me dejaras a pesar de lo que pase.
—Claro, yo no soy así.— Me da un abrazo y me empieza a contar.
—Pues como ya sabias Mario fue de vacaciones y conoció a una chica, ella la invito a su cumpleaños en la playa y como se gustaron se hicieron novios y como cualquiera pareja de novio se besaron, cuando Mario llego al D.F le contó a Gaby la historia y a parte los sentimientos hacia ti.
—Gracias.
—De nada amiga.

Me siento tan triste, esa fue la primera vez qué entable una platica con ella y nos hicimos amigas. La extraño, recuerdo su sonrisa de complicidad conmigo. Ahora las horas se pasan muy rápido y cuando menos me doy cuenta la chicharra suena diciendo que han terminado las clases. Corro y veo a papá me da tanta alegría, pronto veré a Marleme, en el camino pienso que voy a decir y como era de esperarse no se que decir.
Llego a mi casa y como rápido, le recuerdo a mi mamá que vamos a ir y ella asiente. Ya vamos en camino y llegamos de inmediato, me bajo y toco el timbre me abre su mamá y me deja pasar pero antes le hago una seña a mis padres que pasaré.
Entro y es un lugar cálido, su madre me lleva a un cuarto, tengo miedo de entrar y ver algo horrible.
Entro y veo a una chica muy diferente, se ve pálida, triste, ojos hundidos, demacrada, aguanto las ganas de llorar y corro a abrazarla.
- Cuanto te extraño - le susurro.
- Yo igual -
Marleme empieza a llorar.
- ¡Ha sido espantoso, una pesadilla, hombres de blanco hablandome, cosas hablando en mi mente y yo aquí encerrada! , por favor no te apartes de mi, no me dejes aquí te lo suplico. -