Mire para todos lados, intentando encontrarlo entre toda la gente, sin ningún éxito fue al jardín a ver si estaba allí, y efectivamente allí estaba, sentado en un sillón con tres chicas, una encima de él, y las otras dos a su lado. Fui hacia él y me paré enfrente con los brazos cruzados.
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-¿Lo estás pasando bien? -¿Que haces aquí? -Vine a ver a mi novio, pero veo que estás bien acompañado. Ya veo que no te importo, porque si te importara no estarías rodeado de chicas. -Mira, nunca me has importado, ni te he querido, solo te quería para hechar un polvo, ya que me habían dicho que antes eras la puta del instituto y que eras una diosa en la cama, pero que luego sin ninguna explicación no dejaste que ningún hombre te tocará, así que tuve que fingir que te quería para poder acostarme contigo, -Eres un imbécil-dije con lágrimas en los ojos. -Me han dicho cosas peores, ahora vete. -Te odio Samuel. Me fui corriendo hasta la barra, me limpie las lágrimas y llamé al camarero que estaba hablando con, por lo que veo, unos amigos suyos. -¿Qué quieres preciosa? -Dame la botella de vodka. -No puedo darte la botella completa nena. -Mira, me acabo de encontrar a mi novio con otras chicas, y me dijo que yo sólo había sido un polvo para él, así que dame la botella o salto yo la barra y la cojo. Según me dio el camarero la botella la incline sobre mis labios, note como el líquido recorría mi garganta, hice una mueca y me dirigí a la pista de baile. 🔹🔸🔹🔸🔹🔸🔹🔸🔹🔸🔹🔸🔹🔸🔹🔸🔹🔸🔹🔸🔹🔸🔹🔸🔹🔸🔹🔸🔹🔸 Me desperté por la luz que entraba por la ventana, me froté los ojos y me dispuse a levantarme, pero un peso en mi cintura no me lo permitía, mira la habitación y me di cuenta de que no era la mía, mira para el otro lado de la cama y vi al camarero de anoche. Maldije por lo bajo e ntente levantarme otra vez lentamente, pero el chico se aferró más a mi y me tuve que acostar otra vez. El chico empezó a abrir sus ojos. -Buenos días preciosa-dijo mientras me abrazaba. -Hola-dije apartándome de él. Me levanté y me empecé a vestir -Hey, tranquila-dijo el chico me cogió de las manos-toma-dijo pasándome su camisa-póntela y vamos a desayunar -me dio un pico. -Ehhh no gracias, me tengo que ir. -No, mentira, ayer me dijiste que tenías la universidad por la tarde, y que tu familia vivía en España, así que no tienes que hacer nada. -Mira,Ehh...-dije esperando a que me dijera su nombre -Aaron -Mira Aaron esto ha sido un error, estaba borracha, esto no tenía que haber pasado. -Eso ya lo veremos- dijo para acercarse a mí y besarme,intenté separarme pero no pude, era más fuerte que yo, al final le seguí el beso, caímos en la cama, yo debajo de él, me empezó a besar el cuello, succionó y mordió, fue bajando hasta mis pechos donde se quedo un rato jugando con ellos, me quitó el sujetador, cogió un pezón entre sus labios y empezó a succionar mientras jugaba con el otro con su mano, me empezó a dar besos hasta el ombligo, cuando me iba a quitar las bragas, cogí fuerzas e hice que se pudiera él debajo de mi, lo besé. -Nena, espera -Que pasa? Me cogió por la cintura, se sentó y me volvió a sentar encima de él. -Así mejor. Me quitó las bragas, me levanto por la cintura me sentó encima de él haciendo que entrará en mi, empecé a moverme, primero lento y luego fui subiendo el ritmo con ayuda de Aaron. Me cogí el pelo y me lo puse a un lado. -Me encanta que hagas eso-dijo y me besó. Lo único que se oía en la habitación eran nuestros gemidos y nuestros labios al separarse y volver a juntarse. -Dios bonita,me encantas- dijo entre besos. Llegamos los dos juntos al orgasmo, dejé caer mi cabeza en su hombro mientras intentaba recupera el aliento. -Dame una oportunidad-dijo Aaron- por favor dame una oportunidad para conocerte, y si eso más adelante podemos intentar algo- me besó - sé que solo nos conocemos de ayer pero yo puedo hacerte feliz. -Vale -Si? -Si Aaron, te daré una oportunidad -Gracias, ahora vamos a celebrar- dijo empezó a moverse, ya que todavía estaba dentro de mi.
