CAPITULO 25: INESPERADO

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Habian pasado varias semanas de aque encuentro entre romi y chano, incluso ya habia finalizado el año. No volvieron a verse ni a saber el uno del otro desde entones, pero ambos cada vez que salian a la calle buscaban al otro por todos lados. Las vacaciones transcurrían con sabor a nostalgia de aquella noche y los dias se pasaban tan lentos como un caracol.
Una noche de enero, Romi habia salido a comer al centro con una prima, luego de comer, dieron unas vueltas por la plaza y su prima le dijo que se iba a una previa con los amigos. Romi se enojo y le dijo que no la dejara sola pero la prima se fue igual, en realidad ella sabia que su prima era media sorete pero tenia ganas de salir y su amiga estaba de vacaciones asi que otra no le quedaba. Romi se quedo sola en el centro y se habia quedado sin plata para el remis, asi que decidió empezar a caminar para su casa antes que su papa la llame y la cague a pedo. Cuando se dio vuelta para comenzar su camino sintio que alguien a su derecha estaba diciendobsu nombre, giro para mirar y lo vio. Chano estaba llamandola desde la vereda de enfrente. Ni biem lo vio, aparte de comenzar a temblar, corrio a abazarlo. Despues del abrazo noto que al lado de el habia una mujer observandola de manera excesiva y la miro.
- Como estas Romi? Tanto tiempo
- Bien, vos? -Contestó ella algo cortante debido a la incomodidad que le causaba la presencia de aquella mujer.
- Re bien, aprovechando las vacaciones.
La aun desconocida mujer le hizo una seña a Chano y se metio en la heladería que estaba allí. Romi aprovechó para informarse.
- Quien es?
- Quien es quien?
- Dale sabes de que te hablo
- Em bueno, ella es... Te cuento todo, resulta que cuando yo iba a la secundaria me gustaba una amiga de mi hermano y fuimos novios un tiempo, despues nos separamos porque ella se fue a vivir a rosario y ahora vive aca y bueno, em ella es mi... Mi novia. - dijo chano
Romi se quedo callada mirando una baldosa floja. No sabia que tenia que hacer, si eso era bueno o malo, estaba perdida.
- ah, que bueno, ojala sean felices, me tengo que ir o mis papas van a matarme, chau.- contesto romi
Chano la saludo con un beso haciendose el superado y apenas Romi se fue largo un suspiro.

Mi profe ChanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora