Aunque la curiosidad mato al gato , también hizo al sabio y por eso mismo abrí la puerta con sigilo , poco a poco de repente un enorme brillo cego mis ojos y sin saber lo que dentro había entre . Noté que la luz poco a poco iba siendo más suave, de repente al abrir los ojos estaba situada al lado de un precioso lago , perpleja miraba el bonito paisaje que parecía de cuento y decidí sentarme a un lado de este era todo tan bonito . Después de un rato sentada decidí salir por el mismo lugar por el que había entrado pero , antes de que me diese tiempo a estar a mitad de camino hacia la puerta empezaron a sonar ruidos extraños y me quedé muy quieta .
