One'shot [Naruto]

"La problemática y el Vago"-ShikaTema

Muchos se preguntarán como termine enamorando una chica tan problemática, y sólo puedo decir que...

Me lo he preguntado millones de veces y aún no encuentro una respuesta.

—¿En qué piensas?—Oí, y ví, a Temari frente a mi.

—No es nada...—Respondí, levemente sonrojado.

Desde hace poco me di cuenta de mis sentimientos por Temari, y desde entonces... Es un poco difícil hablar con ella.

—Hace tiempo que actúas muy raro, ¿No te pasa nada?—Cuestionó, acercándose a mi, demasiado.

—Estoy bien, sólo...—Dude.

—¿Sólo...?

—No es importante.—Concluí.

—Anda, Shikamaru, dime, moriré de la curiosidad.—Imploró, frunciendo el ceño e inflando ligeramente sus mejillas.

—...—Vi a Temari suspirar, está bufo, dándome mi espacio de vuelta.

—No tienes que hablar si no quieres.—Soltó en tono comprensivo, cosa que agradecí.—Ahora...  ¿Cómo esta Mirai-chan?

—Muy bien, muere por verte.—Mencione, recordando la veces que iba a ver a Kurenai-sensei y Mirai preguntaba por mi "novia".

—Esa pequeña es adorable, quisiera tener una niña como ella.—Río divertido.

Me sonroje ante esa imagen. Temari con una bebé. De verdad sería algo lindo de ver...

—¿A ti te gustaría tener una niña?—Cuestionó Temari.

—B... Bueno...—Calme mi garganta para responder.—Si me gustaría tener un niño y una niña...

—¡¿Verdad?!—Temari parecía apoyar mis palabras, más aún, gruño.—Ya somos dos, pero con Gaara y Kankuro es muy difícil conseguir novio... Ambos son muy protectores, y eso que soy la mayor.—Soltó, demostrando su descontento.

—Ya veo... ¿Y no hay nadie que te guste?—Fue inconsciente, espero no haber sido muy obvio.

—Si hay alguien.—Respondió, desvíe la mirada incómodo. Como siempre, ella es muy directa.

—Ya veo...—Sólo eso logré decir.

—Estas muy raro.—Apunto está, yo sude.

—No es nada, será mejor volver, Mirai quiere verte.—Desvíe el tema, esta no pareció caer del todo.

—Claro.—Note leve entusiasmo en esa palabra.

OoOo

Ví a Temari jugar con Mirai, no evite suspirar, y no por pereza precisamente.

—Ese suspiro no me dice nada bueno.—Oí una voz conocida. No evite reír ligeramente.

—Kurenai-sensei...

—¿Te pasa algo, Shikamaru?, usualmente cuando Temari viene a la aldea estas más alegre.—Note perfectamente ese tono burlesco.

Me sonroje, sólo pude desvíar la mirada.

—¿Tan obvio soy?

—Un poco.—Río está un poco.—Pero algo te pasa, ¿no?

—Tan sólo...—Mire el despejado cielo, sin nubes que me calmen.—No creo tener oportunidad con Temari...

—¿Por qué lo dices?

—A ella le gusta alguien.—Solté, con fastidio.

—¿Y sabes quién es?

—No.

Kurenai-sensei sonrió. Una palmadita me dió en el hombro.

—Sólo te diré que no te rindas, pero es tu elección, Shikamaru.

La mire confundido, pero termine sonriendo. Sus palabras me daban paz.

—Mirai ya está dormida, gracias por venir Temari.—Agradeció Kurenai-sensei.—Quería verte desde hace tiempo.

—Yo feliz, Mirai es adorable.—Sonrío Temari, aveces era sorprendente que fuera tan buena con los niños con ese carácter.

—Ven cuando quieras.—Kurenai dió una última sonrisa, Temari asintio.

—Claro.

—Adiós, Temari, Shikamaru.—Moviendo su mano, nos dejó.

—Adiós.—Dijimos antes de irnos, comenzamos a caminar.

El camino estuvo silencioso, hasta que, no se como, termine acorralado en un callejón por Temari.

¿Esto no es usualmente al revés?

—Estoy harta, ¿Qué demonios te pasa?—Temari pego su rostro al mío, se demostraba el fastidio en su voz.

—T... Temari...—Me sonroje por la cercanía, está estaba molesta con la nariz arrugada.

—¡Responde!

El pensar era difícil, así que solté lo único que sentía.

—Me gustas...—Murmuré, sentí el agarre más débil, por lo que la mire, sus ojos estaban más abiertos que antes.

—... ¿Qué?—Parecía confundida.

—Me gustas.—Repetí, un poco más fuerte, dejando claro aquello. Aunque fuera vergonzoso, ya no quería ocultarlo.

—No te oigo.—Soltó, burlona. No evite gruñir.

—¡Me gustas, Temari!—Era vergonzoso, pero ella me sonrió, sonrojada.

—Ya te habías tardado, idiota.—Hablo con su sonrisa de siempre, es que era tosca, pero hermosa.—Me hiciste esperar demasiado, no te lo perdonaré.

Lo único, y más inteligente que pude decir, fue un perfecto;

—¿Qué?

—Que me gustas también, vago.—Corto, con una gran sonrisa.

Mi rostro enrojeció, no era por menos, mi mano derecha termino cubriendo todo de mi rostro.

—¿Por qué eres tan problemática...?

Oí a Temari reír. La duda que tenía se la dejé saber.

—¿Cómo me pude enamorar la chica más problemática del planeta?

Ella sonrió.

—Y yo del más vago de todo Konoha.

Sonreí, ella se me acercó.

—Dime, vago... ¿Desde cuándo te gusto?—Su tono me hizo temblar, ella disfrutaba eso.

—Ah, bueno...—Rasque mi nuca avergonzado.—Puede que desde siempre.

Ella río, paso sus brazos por mi cuello, acercándose.

—Hay algo que quiero hacer...—Murmuró, uniendo sus labios con los míos. Me sonroje, pero claro, también correspondí.

—Eres una problemática...—Masculle, para tomar aire y volver a unir nuestros labios. Ella me sonrió de ese modo otra vez.

—Y tú un vago llorón.

Él beso continuó.

A decir verdad, no me molestaba del todo eso ya.