Habia anochecido, me encontraba sobre la casa rodante haciendo vigilancia, cuando decidí que era tiempo de buscar a Sophia, bajé y en voz baja le dije a Dale que me iba y revisé que mi arma estuviera cargada y la puse en mi cinturón, le entregué a Dale su rifle y el me dio una linterna.
-Ten cuidado, hija-asentí y verificando mi cuchillo caminé
hacia la orilla de la autopista. Escuché un ruido y vi a Daryl salir de la casa rodante y dirigirse hacia mi.-Voy contigo-avisó con la ballesta en su espalda.
-Está bien-dije y nos adentramos en el bosque-espera.
Él se detuvo preguntándose porque lo hice, saqué un cigarrillo y repetí el mismo proceso que hace unas horas.
-¿Quieres?-le ofrecí, no dijo nada sólo tomó uno y le pasé el encendedor para que lo prendiera. Continuamos y después de unos segundos habló.
-¿No eres muy chica para fumar? -en tono casi susurrante preguntó burlón y lo miré mal.
-¿No eres demasiado viejo para hacerlo?-expulsé aire formando una pequeña nube gris que al segundo se disipó-Tengo 25 años, no soy chica. Tenemos que buscar a Sophia.
Tenía la linterna en alto junto con mi cuchillo, disparar en la noche sería mucho riesgo, alumbrabamos el mayor terreno posible de vez en cuando llamando a Sophia.
-¿Por qué no fuiste a la granja? Se que te preocupa el hijo de Rick-me sorprendió por su pregunta.
-Quería ir...pero no soportaría ver a Carl así, no sabría que decirle a Rick o a Lori además Rick hubiera querido que la búsqueda por Sophia continuará, por eso me quede . Confío en que Carl va a estar bien.¿Piensas que la encontraremos?
-¿Tu?
-Pienso y espero que si-respondí sincera-Por eso es que estoy aquí.
-Todos tienen la misma mirada-dijo refiriéndose a los demas-¿Qué demonios les pasa? Recién comenzamos a buscarla.
-Digamos que no todos son muy positivos...
-No son las montañas del Tíbet es Georgia, podría estar escondida en una granja en algún lugar. La gente se pierde y sobrevive, sucede todo el tiempo...yo era más joven cuando me perdí...
《Pase nueve días en el bosque comiendo bayas y limpiándose el trasero con roble venenoso, mi viejo estaba de juerga con una mesera. Merle cumplía otra condena en el reformatorio. Ni siquiera sabían que no estaban. Pero logre regresar, fui directo a la cocina y me hice un emparedado. No fue tanto drama salvo el trasero que me picaba demasiado》.
Una carcajada se me salió.
-¿Dije algo gracioso?
-Lo siento, es muy triste...y gracioso. Me paso algo parecido...
-Mis padres me llevaron a la fuerza a un tipo de curso de verano, sabía que solo me llevaban porque no querían que pasara las vacaciones con ellos, a veces era muy detestable. El curso era sobre acampar y a la primer noche me perdí en el bosque, fue muy gracioso anduve vagando por días hasta que por fin llegue al campamento. Nadie me estaba buscando, nadie recordaba a la niña berrinchuda, yo lo único que quería era regresar a casa.
-La única diferencia es que Sophia tiene gente buscándola y diría que eso es una ventaja-me dijo Daryl después de terminara de contar la historia que hoy me parecía graciosa.
-Las cosas cambiaron-dije-cuando te perdiste no había gente muerta intentando comerte.
Escuchamos unos ruidos y con cuidado nos aproximamos a donde provenían encontrándonos una tienda de campaña y algunas latas abiertas, unas ramas se movieron y alumbre a mi alrededor y nos encontramos con un caminante colgado.
-"Me mordieron tengo fiebre, el mundo se ha ido al diablo. Mejor me rindo"-Daryl leyó lo que decía un letrero pegado al árbol.
-Qué idiota-comenté asqueada.
Daryl hizo una mueca.
-Hizo lo que Jenner, se rindió.
-Pero él no tenía opción-alumbré al caminante que nos gruñía-Jenner si...Jacqui también.
-¿Así que no estabas de acuerdo con ellos? -preguntó queriendo saber mi opinión.
-Claro que no-contesté un poco ofendida-Uno no se rinde tan fácil, menos cuando aún hay oportunidad.
-Se convirtió en un enorme pedazo de carnada colgante. Y en un desastre-dijo Daryl, el caminante se empezó a mover más y estiró sus brazos en nuestra dirección -es lo más cerca que ha estado de comida desde que se convirtió. Colgado ahí como una gran piñata.
-No perdieron el tiempo-miré sus piernas las cuales solo eran huesos sangrientos-Qué asco.
-Regresemos.
-¿No lo vas a matar?
-No le hace daño a nadie...tampoco voy a gastar una flecha.
-¿Pero que tal que la cuerda se rompe?-pregunté cuando se dio la vuelta para regresar, no me sentía segura dejando a un caminante vivo-Déjame intentarlo.
-¿Intentar que?
-Dispararle con tu ballesta, prometo solo gastar una flecha ...tengo buena puntería-alumbraba a Daryl para verlo mejor, hizo una mueca y asintió entregándomela, la sostuve acostumbrándome al peso y apunté. Sentí una mano en mi espalda y otra en mi hombro lo que me causó un escalofrío.
-Debes estar derecha-Daryl hizo que me enderezara aun con su mano en mi espalda logré concentrarme y disparar la flecha directo en la cabeza del caminante.
-Bien-le sonreí y pareció que el intento hacer lo mismo pero solo hizo una mueca, reaccionando le di la ballesta de vuelta-Ya hemos estado buscando por un tiempo, hay que regresar.
-Esta bien-no habíamos tenido ningún resultado y eso no hacia que me sintiera mejor.
Regresamos a la autopista y vi a Carol quien se dirigía a la casa rodante, al ver a Daryl y a mi regresar sin su hija.