Pequeñas Black Y La Piedra Filosofal (TERMINADA)

4. "La Ceremonia De Selección"

La puerta se abrió de inmediato. Una bruja alta, de cabello negro con túnica verde esmeralda, esperaba allí.
Tenía un rostro muy severo.

-Los de primer año, profesora McGonagall.- Dijo Hagrid.

-Muchas gracias Hagrid, yo me ocupo de ellos.

Abrió bien la puerta. El vestíbulo de entrada era enorme. Las paredes de piedra estaban iluminadas con resplandecientes antorchas como las de Gringotts; el cielo raso era tan alto que no se veía y una magnífica escalera de mármol frente a ellos conducía a los pisos superiores.

Siguieron a la profesora McGonagall a través del piso de piedra señalizado con banderas. La profesora McGonagall llevó a los de primer año a una pequeña cámara vacía, fuera del hall. Se juntaron allí, más cerca unos de otros de lo que estaban acostumbrados, mirando con nerviosismo a su alrededor.

-Bienvenidos a Hogwarts -dijo la profesora-. El banquete de comienzo de año se realizará dentro de poco, pero antes de que ustedes ocupen su lugar en el Gran Comedor, deberán ser seleccionados para sus casas. La selección es una ceremonia muy importante porque, mientras estén aquí, sus casas serán como su familia en Hogwarts. Tendrán clases con el resto de la casa que les toque, dormirán en los dormitorios de sus casas y pasarán el tempo libre en la sala común de la casa.
》Las cuatro casas se llaman Gryffindor, Hufflepuff, Ravenclaw y Slytherin. Cada casa tiene su propia noble historia y cada una ha producido notables hechiceras y magos. Mientras esten en Hogwarts, sus triunfos harán que sus casas ganen puntos, mientras que cualquier quebranto de las reglas, les hará perder puntos. Al finalizar el año, la casa con más puntos es premiada con la Copa de Casas, un gran honor. Espero que cada uno de ustedes sea un orgullo para la casa que le toque.
》La Ceremonia de Selección tendrá lugar en pocos minutos, frente al resto del colegio. Les sugiero que se arreglen todo lo que puedan, mientras esperan.

Pauline se ató una coleta y se aseguró de que esté perfecta, y Maddie trató de aplastarse un poco su cabello alborotado, pero no tanto como el de la niña del tren.

Las niñas jadearon. Unos veinte fantasmas acababan de pasar a través de la pared de atrás. De un color blanco perla y ligeramente transparentes, se deslizaron por la habitación, hablando unos con otros, casi sin mirar a los de primer año. Parecía que estaban discutiendo. El que parecía un monje gordo y petizo, decía:

-Perdonar y olvidar. Yo digo que deberíamos darle una segunda oportunidad..
-¿Mi querido Fraile, no le hemos dado a Peeves todas las oportunidades que merece? Nos creó mala fama a todos, y usted lo sabe, ni siquiera es un fantasma.. me pregunto que hacen todos ustedes aquí.
Un fantasma con malla de baile y gorguera de pronto se había dado cuenta de la presencia de los de primer año.
Nadie respondió.
-¡Alumnos nuevos! -dijo el Fraile Gordo, sonriendo a todos-. ¿Están por seleccionarlos, supongo?
Algunos asintieron.
Maddie y Pauline estaban sorprendidas por la presencia de los fantasmas.
-¡Espero verlos en Hufflepuff! -dijo el Fraile-. Mi antigua casa, ya saben.

La profesora McGonagall volvió.
-Ahora, formen una fila.- Dijo la profesora a los de primer año.- Y siganme.

Luego, en fila, todos los alumnos de primer año entraron al Gran Comedor. Era un lugar extraño pero a la vez espléndido. Estaba iluminado por miles y miles de velas que flotaban en el aire por sobre cuatro grandes mesas, en donde el resto de los estudiantes ya estaban sentados. Pauline y Maddie miraban el lugar asombradas.
En las mesas había brillantes platos, cubiertos y copas de oro. Al fondo del comedor había otra gran mesa, donde se sentaban los profesores. La profesora McGonagall condujo a hasta allí a los alumnos de primer año y los hizo detener, enfrentando a los otros alumnos y con loa profesores detrás de ellos.
Maddie y Pauline se fijaron en el techo, el cual estaba salpicado de estrellas.
"Es un hechizo para que parezca como el cielo de afuera, lo leí en Historia de Hogwarts" Murmuró Hermione, lo que hizo que Maddie rodara los ojos. No la aguantaba.