Visita inesperada

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Sasuke miraba con temor a la sombra que salía del cuarto de su amo, corrió al primer piso donde empezó a maullar como si su vida dependiera de eso, y podría ser, cuando llegó a la sala vio a los que antes tenían una "escena familiar" y desesperado empezó a maullarles mientras alaba al menor de su pantalón Jean.

- Sasu, que sucede? - para la mala suerte del felino no estaban los que le podían entender y estaba empezando a hiperventilar, raro en un gato; pero, posible, los mayores vieron la desesperación del felino y el Hatake que estaba familiarizado con ese tipo de "comportamientos" decidió seguirlo - Muestranos Sasuke.

El gato negro corrió y como era demasiado rápido, el menor, iba a usar su rapidez cuando recordó a su profesor~próximo familiar y se sorprendió al ver que tenía super velocidad - "Así que ese es tu poder.."- pero como no era tiempo para eso también corrió y cuando subieron vieron a la sombra que anteriormente vio el gato, sin pensarlo el rubio se lanzó dispuesto a atacar al individuo.

- Espera, Naruto! - el menor paro abruptamente al reconocer la vos de la persona que tenia contra la pared.

- ¡¿Kiba?! Que haces aquí?! - su mejor amigo sonrió nervioso y pidió que se alejara, ya que, estaba muy cerca de su rostro - Responde - exigió y el chico~perro se rasco la nuca nervioso mientras señalaba el cuarto del rubio.

Este se dirigió a su habitación y casi se desmaya al notar que casi todos sus amigos estaban ahí.

- Naruto, que pasa? - el mayor presente se acercó al cuarto y se sorprendió, pero río al ver la cara de estupefacción de su posible próximo hijastro.

- SE PUEDE SABER QUE HACEN EN MI CASA?! - gritó tan fuerte que se escuchó hasta el sótano y usando un sello te teletransportacion el mayor de los Namikase apareció en la habitacion de su hijo, se veía serio, dispuesto a matar a cualquiera que quiera hacerle daño a sus hijos; pero, cuando vio a todos los amigos de sus hijos mirándolo con miedo cambio su rostro por uno más amable y confundido.

- Que hacen aquí? Si saben que hay una puerta ¿verdad?- hablo divertido su profesor y todos rieron nerviosos.

- Discúlpanos Naruto, pero nuestros padres creían que era desde temprano - explicó Shikamaru.

- Tu también? Bueno, papi...- al mayor le salió un tic ya que no entendía nada, pero estaba seguro que algo no andaba bien.

- Se puede saber como han entrado? - pregunto el doncel mayor. El había puesto mucha seguridad y le parecía raro que hayan entrado así no más.

- No es muy difícil, un día Naruto nos enseñó a burlar la...- no pudo terminar pues el mencionado había corrido para taparle la boca antes de que dijera algo que no le convenia.

- Jejeje no le escuches oto~chan...- el menor estaba nervioso, así como pediría que sus amigos se queden esa noche.

- Namikase~Sama queríamos informarle que esto no es culpa de sus hijos, nosotros burlamos la seguridad por una pequeña travesura, y sabemos que no tenemos ningún derecho a pedirle nada; pero, queríamos saber si podíamos quedarnos esta noche para mañana por la mañana y ir al paseo - pidió educadamente, sorprendiendo a todos, Sakura Haruno, ella sonrió con complicidad y todos miraron con ojitos suplicantes al mayor, o al menos la mayoría.

- No lo se..mmm - el mayor miro a todos, eran muchos, pero había suficiente espacio - Me encantaría que me den una razón para permitirles quedarse en mi casa - Minato se mostraba serio, no quería problemas, pues sabía que muchos de esos niños sus padres eran humanos, y algunos ni sabían de las habilidades de sus hijos.

- Pues...Namikase~Sama usted también fue adolescente, y me imagino que sabe que todos tenemos nuestros momentos de locura - el rubio río internamente, pero aun se mostraba serio - Y este es uno de esos, le hemos dicho a nuestros padres que el viaje empezaba hoy, para ir en la noche de fiesta - a todos les sorprendió que el serio Neji dijera eso; además, el sólo hecho de aceptar ir era bastante raro.

- Niños no deberían mentirle a sus padres, pero tienen razon; sin embargo, a la próxima pidan permiso - dicho esto les sonrió como sólo él sabía hacerlo, todos suscitaron aliviados, pero la mayoría se alegro de que el mayor de los Namikase sea tan liberal, aunque sus hijos lo miraban con los ojos desorbitados, ¿porque con ellos no era así de liberal?

- "Tal ves porque somos sus hijos" - razono el hermano mayor.

- "Si seguro es por eso" - se sonrieron bobamente y junto con todos bajaron para estar un rato en la sala, era mucha gente, pero el lugar era enorme.

- Me alegro que no haya sido nada malo, gracias por avisarnos sasu - el minino no se sentía del todo bien, había recordado unas cosas que no le gustaron, se recosto en el regazo de su amo buscando calor y cariño, el cual consiguió fácilmente, la pelirroja noto que el gatito estaba algo asustado así que pregunto.

- "Todo bien? Sasu~chan" - el minino hizo un aullido que sólo ella escucho.

- "Perfecto sólo recordé unas cosas que no me agradaron" - explicó y ella sonrió tiernamente.

- "Nada te pasara, pronto llegará el momento de la verdad Sasuke, que haras?" - la namikase se puso por un leve momento sería, pero sonrió para que nadie notará lo que pasaba, aunque el pelirrojo, su mejor amigo, escuchaba todo sin que se den cuenta.

- "La verdad, no lo se..." - y ahí terminó su pequeña conversacion, el Namikase noto a su mascota rara por lo que la abrazo y dejo que esta se acomodara en su pecho, el minino rapidamente se relajo.

CONTINUARÁ...

Mi Gato Está...¿¡Enamorado De Mi!?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora