Mi Gato Está...¿¡Enamorado De Mi!?

Entrenando

Todos hablaban amenamente, absolutamente todos, hasta el gato que era traducido por los que podían entenderlo.

De pronto, sonó el estómago de la pelirroja, todos rieron sonrojandola.

- No seáis así! Ya son las dos de la tarde! - exclamó sorprendida, el tiempo paso volando.

- Yo también tengo hambre - dijo Chouji, todos le miraron con una gotita en la cabeza, el que había hablado ya había comido 10 bolsas de papitas.

- Jeje okey, voy a cocinar algo, alguien quiere ayudar? - preguntó el Namikase mayor y los que querian se levantaron, todas chicas.

Entonces, Minato, Samantha, Ten ten, Ino y Hinata se fueron a cocinar.

- No vais a ir? Sakura, Temari - ellas negaron.

- No somos muy buenas cocinando - susurro un poco avergonzada Temari.

- Pero sois buenas en algo, estoy seguro! - exclamó Lee poniendo una pose extraña, todos rieron.

- Que hacemos mientras ellas cocinan - todos se miraron sin saber que hacer del todo.

- Saben que aquí podemos usar nuestros poderes porque todo esta protegido, además de la paredes que rodean toda la mansión, podemos entrenar en el patio trasero - sugirió el Namikase y todos se animaron.

- Pues vamos! - gritó el Hatake sorprendiendo a todos.

- Usted también sensei?! - exclamó el Inuzuka.

- Claro, yo también tengo trucos bajo la manga, Naruto ya sabe uno de ellos, pero no todos - todos se emocionaron al saber que al fin podrían saber los poderes de su sensei - Y aquí llamenme Kakashi, por favor - todos asistieron.

- Una carrerita? Oto~San - todos se sorprendieron de como Naruto llamó a Kakashi, pero más de lo que le pidió; después de todo, Naruto tenía super velocidad, y eso era una increíble ventaja.

- Me encantaría! - dicho esto ambos usaron su velocidad llegando rápido al patio trasero, todos tenían los ojos desorbitados, ya sabían un poder de su profesor.

- Fantástico - susurro Kiba emocionado.

- Quien lo diría - habló Neji, todos concordaron con él.

- No hay que hacerlos esperar - sorprendiendo a todos, Shikamaru fue el primero en salir al patio, pero con su típico paso lento y aburrido.

- Vamos! - gritó Lee y todos salieron encontrando a su sensei con una sonrisa debajo de su bufanda y a su amigo deprimido - No te preocupes Naruto! Seguro lo haras a la proxima! - le reconfortaba.

- Como es posible cejotas, yo soy el hijo del relámpago amarillo! Y aun así perdí contra Kakashi - todos rieron, pero le tenian mucho respeto al señor Minato que era conocido por rescatar niños de experimentos, nadie sabía el oscuro pasado de sus amigos, pero si que su padre tenía una gran motivación, el rubio mayor era conocido como el relámpago amarillo, porque iba tan rápido que lo único que llegaban a ver era una mata amarilla que iba a una velocidad increíble.

- Tranquilo naru, ya mejorar as - le reconfortaba el mayor presente.

- Malo oto~San! Tú lo dices por que eres muy rápido, más que yo - hizo un puchero y todos rieron.

- Naruto porque le dices oto~San a Kakashi~San - pregunto extrañado el Nara.

- Como saben, cuando era pequeño Kakashi nos enseñó enseñó mi y a Sam, en esos tiempos Kushina no estaba por que había ido de viaje, entonces mi hermanita y yo nos acostumbramos a llamarle así, pues lo veíamos como a un segundo padre - todos entendieron, excepto el porque Naruto llamaba a su mamá Kushina por su nombre, y el porque esta no estaba presente.