Por la tarde tuve problemas con mi madre por la comida, ahora tengo que conseguir un empleo para reponer la comida que había terminado sobre mi ropa. Le había contado alguna parte de la verdad; que venía caminando del supermercado y me tropecé con la raíz de un árbol...
Cuando entré a la escuela, el ruido y lo mismo de siempre estaban presentes; siendo ignorada por la mayoría de las personas caminé hasta mi aula. Tendríamos un laboratorio de Química, así que, la profesora nos esperaría en el salón.
Entré arrastrando mis pies, manía que había tenido desde hace un par de años. Me senté en una de las sillas de la parte delantera, y esperé a que la profesora llegara.
Cuando la maestra llegó todos la seguimos hasta el laboratorio, al entrar cada uno se puso una bata para no arruinar la ropa o eso creo, y nos fuimos ubicando en los respectivos mesones.Lo que no esperaba era que Alice estaba junto a mi, la piel se me erizó... el hecho de que muy cerca de nosotras se encontrara un tarro con ácido y todo tipo de sustancias inflamables provocó que a mi mente llegaran todo tipo de pensamientos repulsivos y asquerosos sobre lo que Alice podría llegar a hacerme. Una vez más, me puse tensa.
A los pocos minutos la clase empezó, y para mi suerte el trabajo era en grupo de dos, y sí los compañeros de mesón eran las parejas. Alice aun no se había quejado porque le tocó conmigo, eso era algo raro, por lo que las sospechas que tenía se intensificaron.
—¿Es cosa del destino o es que eres masoquista?—fue lo dijo antes de empezar a trabajar.
(...)
El laboratorio estaba a punto de terminar, por la misma razón, la profesora había salido por unos recipientes en donde poner las sustancias. Alice no perdió la oportunidad.
De un momento a otro ya tenia el tubo de ensayo en donde estaba el ácido que utilizamos.
—Que bonita cara tienes Brooke...pero creo que necesitas un pequeño arreglo—Alice lanzó la sustancia directamente a mis ojos, pero fui un poco más rápida que ella, interpuse mi mano derecha. Grité de dolor, nadie se movía, todos habían visto lo que había pasado, pero como era yo, se hicieron los ciegos, sordos y mudos. El ácido ardía demasiado, mi piel era carne viva. ¡¡Parecía un quemadura grave!! Quise matarla.
—¡Ooops!—perra—Que lastima que no cayó en tus ojos...no me gustan, ¿sabes?
Salí corriendo directo a la enfermería, no me atrevía a echarme algo en la mano, tal vez eso podría reaccionar. Mis ojos se aguaron por el dolor.
Cuando llegué la señora encargada me atendió, era ácido lo que había caído en mi mano y sabía que las consecuencias no serian muy agradables que digamos.
Tratando de no chillar por el dolor, pasé casi toda la mañana en la enfermería.
Me recosté en la camilla. Ahora tenía que inventar una buena excusa para lo del ácido, tanto la profesora como mi madre no se iban a creer el cuento de que eso había sido un accidente.
Cerré los ojos por unos minutos, los cuales se hicieron horas.
(...)
—Te dije que necesitabas ayuda...—¿Que mierda hacia Alex aquí?
Quería que se fuera, eso debía hacer.
Mis ojos estaban cerrados. La anestesia que me habían aplicado para el dolor hasta ahora hacia efectos.
Sentí los dedos de Alex recorrer mi rostro. Algo que no esperaba era el beso que dejó en mis labios.
La misma sensación de vacío se posó en mi cuando se alejó unos centímetros de mi.
No me atrevía a hablar sería demasiado para mi. No me atrevía a abrir los ojos, moriría de vergüenza.
—Se que estas despierta, Brooke—Me tensé.
Escuché su risa, música para mis oídos... y ya estaba hablando como un estúpida.
—Vamos...abre los ojos, ¿sí?—no lo hice— si no los abres ahora mismo, te volveré a besar y esta vez....durante más tiempo.
No los abrí.
Esperé a que cumpliera lo que había prometido, y cuando lo hizo, exploté.
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Alex y yo durante el bullying (OstonHill #1) (EDITANDO)
Short StoryBrooke es una chica que sufre bullying, un tanto terca y "antisocial" . Alex, carismático, alegre y un chico que busca ayudarla. "Esa noche me convencí de que él no era para mí, que mi maldito corazón estaba destrozado y que nadie moría por amor...