Ha*Ash Hermanas, Amigas Y Enemigas.

Capítulo IV: Reencuentros

-¡Hanna, Hanna! ¡Despierta! Ashley despertó!- gritó muy emocionada Matilda-Me acaban de llamar, floja ya despierta vámonos a ver a Ashley-.

-¿Ashley?¿Ashley? Si ¡Ashley!- Hanna inmediatamente se dirigió al auto con su mamá y fueron por Grace.

Entraron a la casa de Grace haciendo un escándalo enorme.

-Abuela, ¡Despierta pero ya!- Gritaba Hanna por toda la casa de su abuela.

-¿Pero qué pasa Hanna?- preguntó confundida.

-Vente al auto, ¡Ashley despertó!- agarró a Grace del brazo y la llevo corriendo al auto.

Matilda condució hacía el hospital.
Hanna llamó a Joy.

-¿Bueno?-Contesta Joy.

-¡Amiga rápido al hospital!¡Ashley despertó!- Hanna no se cansaba de gritarlo, esta noticia la tenía más que feliz.

-¡Ah! !Ash, mi bebé! En este momento voy!-Joy colgó el teléfono y se dirigió para allá.

Cuando llegaron al hospital Hanna estaba muy ansiosa, ya quería verla pero algo se lo impidió.

-Lo siento mucho-Hanna interrumpió al doctor.

-¿Cómo, que dice, Ash murió? ¡no!- Hanna empezó a llorar al igual que Grace y Matilda.

-Pe...- el doctor vuelve a ser interrumpido.

-¡Ya llegué, quiero ver a Ash!- grita Joy.

-Ashley murió Joy- grita Hanna.

-¿Cómo? ¿Mi Ashley?- dice Joy y todo era llanto.

-¿Ashley murió?- derepente gritó Raúl y se asomó, pues escuchó todos los gritos y llantos-¡No!-Comenzó a llorar.

-¡Permitanme acabar!- Gritó el doctor-Ashley no murió, al contrario, ella despertó pero si ve a alguien de ustedes le aceleraría mucho el corazón y esta delicada, será mejor que descanse más, aunque esta fuera de peligro, por cierto iba a decir ¡lo siento mucho no pueden pasar!- se alteró el doctor.

-Yo quiero ver a Ashley- dijó Hanna desesperada.

-Y yo- replica Joy.

-¡Nosotras igual!- dice Matilda.

-Yo quiero ver a mi limoncito mas que nadie, doctor déjeme pasar- imploró Raúl.

-Ya les dije se aceleraría mucho- contestó desesperado el doctor.

-Bueno, por Raúl a Ashley ni se le acelera el corazón- bromeó Joy.

-Si quieren afectar el bienestar de Ashley ¡adelante!- dijó el doctor sarcástico.

-Tiene razón hay que dejar a Ashley descansar-dijó Hanna.

-Esta bien, creó que hay que regresar a dormir- dijó Joy.

Hanna esa noche tenía insomnio, no podía dormir con la emoción de que Ashley ya había despertado, contaba cada segundo, cada minuto, cada hora, se sentía aliviada y más alegre que nunca, nada más pensaba en Ashley, pero había algo que le preocupaba y era decirle a Ashley que ya no podían asistir al Lousiana Music Cavalcade, pues a Ashley esto la ponía más feliz que nada en el mundo, y para ese evento faltaba sólo 4 días.

A la mañana siguiente Joy fue a ver a Hanna para ensayar.

-Hanna, ven, vamos con Grace a ensayar, verás que si ensayamos mucho ganaremos el concurso y pagaremos lo que le debemos a David.

-Esta bien, vamos- se dirigieron a la casa de Grace y ensayaron pero Hanna no se podía concentrar nada más en Ashley, esperaba una llamada diciéndole que ya la podía ir a ver.