No me dejes..

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Habían pasado 7 semanas, a una semana de los 9 meses. La barriga de Amanda parecía un balón gordo, un lindo y tierno balón gordo. Ya le quedaba poco para dar a luz al tan esperado bebe Rollins-Amaro, o como fin dice, al bebe Rollaro. Todavía no habían elegido el nombre que lo represente toda lo que dure su vida.

Amanda estaba en su apartamento, como lo estuvo en las ultimas 6 semanas, desde que empezó su semanas de maternidad. Mientras que Nick se iba todas las mañanas a la brigada a trabajar, ella se quedaba cuidando de Sara y frannie.

Eran finales de octubre para ser mas exacto el 29. Como los últimos días Amanda y Sarah estaban en el departamento de ella.
Era la hora del almuerzo, ellas estaban en la cocina tratando de "Cocinar" unos caseros y deliciosos spaghetti. Después de terminar de hacer la cena, Sarah estaba cubierta de harina, en sus pequeñas manos, en su cara, y por todo su delantal de cocina que llevaba puesto, en cambio Amanda solo tenía un poco en el borde de su nariz y en su frente, en un momento luego de terminar de amasar, tuvo picazón.
La cocina había quedado hecha un desastre, tendrían que limpiar luego de comer.

-¿Oye princesa, quieres un poco de helado?- Amanda dice después de levantar los dos platos de la mesa.

- ¡Si! ¡Si manda!- Sara exclama con emoción.

-Bien- Amanda sonríe y pasa su mano acariciando la cabeza de la pequeña.

Luego de colocar el helado en la mesa, Sara habla..

-¿Amanda..?- Dice con timidez.

-¿Si, pequeña?- Amanda guineo su ojo dándole confianza.

-¿Que..va a pasar..cuando nazca el bebé?- Sara dijo con vergüenza y bajó su mirada al pote de helado que Amanda había dejado para ella, viendo el reflejo de su rostro con la cuchara.

-¿Cuándo nazca el bebé? ¿Que tiene que pasar, miel?- dijo mirándola con una sonrisa -Dime...- puso su mano en la de Sara - No tengas vergüenza.

- ¿Mi papa y vos van a querer mas al bebe que a mi?- Sara dijo con una rapidez que Amanda tardo en comprender...

-¿Qué? ¡Claro que no!..- Amanda dio un suspiro - Tú papá te ama..y yo también pequeña, siempre te vamos a querer, al igual que a tu hermanito-

-¿Tu, me quieres? - Sara pregunto con una enorme sonrisa.

-¡Claro! ¿Como no te voy a querer.. si eres mi pequeña mimada?- sonrió y estiro sus brazos y manos para darle un abrazo el cual Sara correspondió felizmente.

Nick entró por la puerta y se encontró con la escena más hermosa, su hija en los brazos de su mujer embarazada. Se quedo un momento mirando hasta que Sara lo vio..

Punto de vista de Nick~

-¡Papi! ¡papi! ¡Papi!- mi hija corrió hacia mi y en un salto me dio un abrazo. Se la veía muy feliz.

-Hola, princesa- Dije cuando bese sus mejillas. Luego mire a Amanda que se había sentado en el sofá. Me acerque a ella y le dí un beso, bueno dos, en los labios, bajé mi cabeza hacia su panza y la bese.

Nick: -¿Como te sientes bebé?

Amanda: -Bien, creo- sonrió débilmente.

La miré por unos instantes...pude notar en esos ojos azules dolor, mucho dolor.

Amanda me mira y dice: -¿Quieres comer? Con Sara hicimos spaghetti ¿Quieres?- dijo con orgullo y emoción.

-Claro bebe- sonreí. Vi como estaba tratando de pararse, con una mano en su espalda y la otra haciendo fuerza con el sillón. -Deja, yo voy- Me paré, le sonreí y le robe un beso.

La Última Nieve En Primavera (En Edición) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora