Una aventura entre rosas [Pausada]

Capítulo 20

Luego de esa increíble velada, los días pasaron lentos. La rutina que se había establecido en esa pequeña casa no se vio alterada, hasta una mañana de finales de mes.

Agatha estaba contando los días para poder ver a su padre y a su hermano. Sabía que pronto podría estar con ellos y contarles las increíbles aventuras que ha vivido. Después de todo, sería la primera vez en dos años que podría celebrar su cumpleaños estando acompañada.

Esa mañana, como era costumbre, Klaus fue el primero en despertar. Sus maullidos hicieron que la muchacha se despertara e iniciara su rutina. Cuando el desayuno estuvo listo, llamo a la puerta de la habitación de Eliot. Soltó una leve risa cuando lo escucho pedirle 5 minutos más.

Desayunaron entre risas y una plática amena. Todo se sentía tan cálido y familiar que ninguno quería que terminara. Eliot se ofreció esa mañana a realizar los oficios del hogar, le había dejado esa responsabilidad por completo a ella y quería darle un día libre de realizarlos.

-Eliot, bueno...- Agatha le dirigió una mirada cuando lo vio salir de la cocina- Con todos los paisajes y retratos que he estado haciendo estas semanas, logré reunir el dinero suficiente para comprar más pinturas y bueno... el duque quiere que realice un cuadro de su familia.

- ¿Y eso que significa? - Eliot parecía exigir una respuesta.

-Significa que debo ir a verlo. Le había dicho que primero hablaría contigo antes de tomar una decisión. Principalmente por Arthur y el hecho de que tendría que ir hasta su mansión para planificar todo.

El silencio que formó entre ambos estaba matando a Agatha por dentro. Klaus salió de allí cuando noto el ambiente tan tenso entre ambos. Eliot solo podía observar entre curioso y molesto a la joven.

-Mejor me iré a hablar con Sonia. De paso compraré algo de comida y también unos lienzos- Ya estaba saliendo de allí cuando sintió los brazos del muchacho rodearle por la espalda.

-Me hubiera gustado poder acompañarte. Si quieres puedes hablar con alguno de sus sirvientes y le dices que iras mañana- El abrazo se hizo más notorio cuando Eliot dejo caer su rostro en el hombro de la muchacha-De esa forma puedo acompañarte y ayudarte en lo que necesites.

-Está bien. Pero de todas formas saldré- Le dio un beso en la mejilla, causando un leve sonrojo en el joven de ojos azules y después cada uno hizo lo suyo.

Eliot salió poco después, pasado el mediodía. Se entretuvo tanto limpiando y acomodando (principalmente su habitación) que se le hizo tarde. Agatha llego poco antes de que saliera, con los lienzos y pinturas a nada de caer de sus manos cuando logró abrir la puerta de la casa. Almorzaron juntos y Eliot le aviso que saldría.

Agatha jugaba con el felino en la sala, le hacía saltar e intentar atrapar una cinta roja. Pensó en lo exhausta que quedaría si hubiera salido a comprar sus cosas a la villa con el sol del mediodía.

Estaba por salir de la casa para seguir jugando con Klaus en el jardín cuando escuchó la voz de una persona que le causaba pavor y asco. Arthur estaba fuera de la casa. Decidió ocultarse y esperar a que se fuera para poder salir e ir directamente con Jaden.

-Agatha... Preciosa. ¿Estás en casa? - La burla y malicia en sus palabras la alertaron- Vi a Eliot salir hace un rato, sé que estas allí. No me tengas miedo, hoy he venido con ganas de hacer las paces.

Agatha percibió los pasos del joven afuera moverse hacia la ventana. Inmediatamente pensó en la locura que Arthur haría y corrió lo más rápido que pudo hacia su habitación. Klaus la seguía de cerca.

Estaba aterrada y confundida, Eliot me dijo que el padre de este loco lo tenía encerrado. No me parece raro que se escapara. Piensa en algo, rápido.

Cuando coloqué mi mano sobre el buró de la habitación, pude sentir el frio de la hoja con la que Arthur me apuntaba directo al cuello. Por unos segundos me sentí acorralada y el miedo me ganó. Klaus se había mantenido quieto en una esquina, dispuesto a arañar a Arthur si se atrevía a hacerme algo.