10☆Jarabe

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Al llegar nos pusimos en marcha. Hicimos senderismo durante un largo rato. No había tormenta, pero si bastante nieve que nos impedía andar con facilidad. De vez en cuando descansabamos.

-¿Cuánto crees que falta Maika?- pregunté.

-Solo queda atravesar el bosque- dijo señalando a lo lejos un montón de altos pinos.

Andar a través del bosque era hermosos, se veía la nieve posada en las ramas... Era perfecto.

-¡Achuus!- estormudo Mike.

-Deja que te caliente el abrigo- dijo James poniendo sus manos.

-No no no! ¿y si lo quemas?- dijo alejandose de él.

-¿No confias en mí?, ya mejoré mis poderes.

Pero se negó, y Mike se pasó la tarde estornudando. Salían pequeñas ráfagas de viento cada vez que estornudaba y movía las ramas del bosque.

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Finalmente llegamos, pero sólo se veía una gran pista de hielo.

-¿Y ahora a donde?- pregunté.

-Mmm...- se quedó pensando Maika. Se acercó a la pista y andó hasta llegar en medio del lugar.

-¿Por qué te paraste?- preguntó tiritando Mike.

-El castillo esta aquí, se a vuelto invisible- dijo seria Maika.

-¿Cómo?- preguntó atónito James.

-Será para que nadie sepa de este lugar- dije -Maika, lanzaré un hechizo de visibilidad- avisé.

Ella se apartó y pronuncié las palabras mágicas, apunté con mi varita y poco a poco el castillo iba tomando color o mejor dicho... forma de cristal.

-¡Bien hecho Lucy!- dijo Maika.

Todos entramos con cuidado en el interior de aquel lugar. Estaba todo muy en silencio...hasta que escuchamos a alguien llorar.

Subimos las escaleras con cuidado hasta llegar a un gran salón. Ahí, divisamos a una  mujer de piel pálida, que le brillaban los ojos y llevaba un vestido de color azul que le colgaban trocitos de cristales.

-¿Quiénes sois?¿Y como habeis entrado aquí?- dijo aún llorando aquella mujer.
Sus ojos goteaban agua para finalmente caer como un cristal.

-Soy yo...Maika- dijo ella acercandose- vengo con mis amigos.

-¿Amigos? Tú no tienes amigos...

-Ahora sí- dijo seria -veo que aún no te has desecho del añillo -dijo mirandolo.

-Maika, ¡es imposible! Una parte de mi es buena pero la otra es ambiciosa- dijo nerviosa la mujer.

-Tal vez yo pueda ayudar- dije.

-¿Y tú quien eres?- preguntó la mujer.

-Me llamo Lucy, soy una bruja blanca- dije.

-Con que la profecía... -dijo de mala gana.

-Luego hablaremos de eso- dijo Maika -ahora Lucy te hará una poción, y volveras como antes- se forzó a sí misma a sacarse una sonrisa.

Yo saqué de mi mochila varias hierbas, James me ayudó a calentar el agua para que finalmente consiguieramos un líquido rosa.

-Aquí tiene- le dí la taza.

La mujer dudó unos segundos en tomarla, pero al olerlo le dieron ganas de probar. Al tomar la medicina su cuerpo desprendía un humo negro que iba desapareciendo, el anillo también.

-Magia negra- dije -esto debe ser obra de él...

Cuando aquélla transformación acabó, la mujer se sintió liberada...y nos lo agradeció...

...

Magia BlancaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora