La Quinta Ola "Sólo somos sobrevivientes"

Capítulo doce

Cassie

Me siento junto a Megan, ya que mi hermano esta sentado junto a Ben esperando su plato de comida y platicando con él. Evan aprovecha para poner agua a calentar en el fuego.

-¿ya puedo volver a la habitación con Cassie?- pregunta Megan a Ben.

-¿No estás comoda?- le pregunto. Ella se acerca para decirme algo al oido.

-No quiero ducharme en su habitación, me da pena.

-Esta bien, vuelve a la habitación y te duchas a medio día- le digo al oido también yo -además Sammy ya esta extrañandote.

Ella ríe y yo le sonrió.

-¿Que tanto se secretean? Pregunta Ben poniendo el plato de Megan frente a ella.

-¡Nada!- se apresura a decir Megan antes de soltar una risilla complice.

Dumbo sirve mi plato, así como tambien el de Evan. Comenzamos a comer una vez que todos ya tienen su plato y estan sentados en nuestro nuevo comedor.

Comemos en silencio y cuando terminamos, Evan se queda para limpiar la mesa, secar y ordenar los trastos que yo voy lavando.

El agua comienza a sacar vapor, así que en lo que yo termino Evan decide llevar el agua a la bañera.

Enjuago el ultimo plato y lo seco, para guardarlo en la parte que queda de la alacena, antes de dirigirme hacia la habitación.

Cruzo la sala percatandome de que Ben y Dumbo están sentados en los sofás despreocupadamente, mientras Sams y Megan estan jugando en el suelo. Así que no me preocupo y me sigo a la habitación.

Cuando entró la puerta del baño esta abierta y puedo ver a Evan sentado a la orilla de la bañera, llenandola de agua.

Me acerco a la cama a tomar nuestra mochila a la que ahora no le cabe ni un alfiler y busco entre el monton revuelto de ropa, apartando la que corresponde a Evan del lado derecho de la cama y la mía al lado izquierdo.

Esto va a sonar estupido, pero extraño los sostenes. Sobre todo ahora que solo cuento solo con uno y que  cuando tengo que lavarlo tengo que sobrevivir sin él hasta que se seca, cosa que tambien me  ocurre con la unica braga que me queda. Extraño sobre todo mi armario, las prendas a mi medida y no tener que pensar quien las utilizo antes que yo, extraño la cootidianidad de la vida, aunque ahora ya sea algo vano, por que lo que más extraño es saber que hay un mañana seguro.

Tomo una sudadera gris y unos pantalones deportivos unas dos tallas mayores a la mia y las aparto en el borde de la cama.

Evan se asoma por la puerta del baño y me dedica una mirada evaluativa, intentando averiguar si ya voy a entrar a Bañarme.

-Ya casi esta- se apresura a decir.

-Si no te preocupes- le digo dirigiendole una mirada rapida antes de comenzar a ordenar la demás ropa que he sacado de la mochila, comenzando por la ropa que corresponde a Evan.

Como las latas de comida (que aproximadamente son unas diez sin contar), son más pesadas están hasta abajo, pongo la ropa encima de éstas, una vez que está doblada.

Doblo apenas unas seis prendas más, antes de que Evan salga del cuarto de baño.

-Hey- me llama, de inmediato me vuelvo para verlo-ya esta.

-Gracias- le sonrio agradecida mientras termino de doblar una de sus camisaa de manga larga y la meto dentro de la mochila.

-De nada- responde él, observando mi trabajo.