DESDE QUE TE VI TE AME (ESTA EDITÁNDOSE)

CAPITULO FINAL XXII: CORAZONES ROTOS PARTE I

Es la hora de nuestra corta despedida, Ana es la primera en regresar a casa y a mi me toca esperar unas horas más para tomar la misma avioneta que la dejara en la ciudad de cancun para tomar el siguiente vuelo.

- Qué es lo que extrañaras de la isla.-Le digo con una mirada de nostalgia.

- Te extrañare a ti y solo a ti.

- Tu no haz partido y ya te extraño. 

- No has visto cómo nos mira la chaperona, como te atreviste a venir a despedirme. Me meterás en problemas si le cuenta a mi madre.

Miro hacia mi derecha y efectivamente la chaperona no me quita el ojo de encima, me escruta como bicho raro.

- Dile que conquistaste a un chico guapo de la isla, que lo hipnotizaste con tu belleza y se despidió por última vez dándote un beso.

- No me haz dado un beso.

- Estoy apunto de dártelo.

La tomo de la barbilla y mis labios buscan los suyos. Mi lengua acaricia la suya tan caliente y tímida, mientras observo de reojo como la chaperona nos mira sin disimulo mientras se hecha aire, pero no producto del calor, sino porque nota que mi mano acaricia el trasero de Ana mientras la beso.

- Creo que le gusto a la chaperona. 

- Porque crees eso.

- Porque no dejaba de mirarme mientras te besaba.

- Voy a tener problemas por tu culpa.

- Ya sabes lo que tienes que decir pequeña.

A lo lejos vemos a Elliot y Kate despidiéndose igual que nosotros.

- Y ellos también tedràn problemas.

De repente una voz conocida y la cual me causa desagrado nos interrumpe.

- Christian y la señorita Steele, que grata sorpresa encontrarla aquí.

Sin mirarme y solo mencionar mi nombre, va directamente a Ana y le da un beso en la mejilla.

- Pero que haces Jack.

Lo tomo del brazo apartándolo de Ana  y me pongo en medio de los dos.

- No te entiendo.

- Claro que entiendes.

- Christian cálmate por favor.

- Señorita Steele no tuve la oportunidad de disculparme con usted, realmente me siento mal por lo que le hice el día de ayer. He sido un canalla y mi comportamiento no ha sido el adecuado, le ruego me disculpe y entenderé si no quiere dirigirme la palabra.

- Sera mejor que te vayas, ella no va ha recibir tus disculpas.

- Con la disculpa bastara, esta todo olvidado.

Pero que mierda pasa que todo se pone en mi contra, este imbécil no ha entendido cuando le he dicho no te acerques a ella y ella lo disculpa como si nada hubiera pasado.

- Creo que vamos en el mismo vuelo señorita Steele, sera un placer hacerle compañía.

- Como que vas en el mismo vuelo.-Le digo con la voz entrecortada.

- Necesito adelantarme antes que mi familia, acomodarme en mi departamento y prepararme para empezar a trabajar con ustedes.

- Que bien trabajaras con Christian. 

- Si señorita Steele.

- Dime Ana por favor.

Pero que carajos porque tan amable con el enemigo.