El Amanecer De Los Lycan

CAPITULO 5

Capítulo 5.

-¿QUE?-lo mire con mi ceño fruncido.

-Se nos hace tarde y a no creo que me dijiste que no te gustaba llegar tarde.-su sonrisa de burla me irritaba.

-No. Necesito las respuestas.-me plante frente a él.

-Luego, yo mismo te las daré.-yo solo negué con la cabeza quería respuestas.-Te lo prometo, luego lo hare pero no aquí, ni ahora.

Suspire solo me quedaba confiar en él. Me rendía por ahora pero de una forma u otra iba a conseguir respuestas.

-Vale, pero luego quiero respuestas.-el asistió.-Y si no me las me vas a tener detrás de ti como garrapata.

-Entendido.-sus ojos destellaron con malicia.-Claro que tener a una chica como tú pegada a mi como garrapata no es tan mala idea.

Yo solo le lance una mirada fulminante y me encamine a la entrada del instituto, con el detrás de mí lo podía oír caminar muy cerca de mí.

Mientras me iba acercando a la entraba pude ver como se amontonaban los estudiantes, unos cotilleaban entre sí, otros trataban en secarse un poquito antes de entrar a clases, pero a ellos los pase desapercibidos , el grupo de nuevo era lo que obtuvieron mi atención, nos miraban con diferentes gestos desde curiosidad a frialdad.

Yo solo fulmine a los que me miraban mal, me importaba poco su mierda asía mí. Algunos me dedicaban pequeñas sonrisas y todos asintieron en saludo a Daniel.

Luego siguieron con lo suyo unos coqueteaban con las porritas, eso me dio un poco de repugnancia, no todas eran malas o zorras algunas eran buenas, pero con las tres que ellos se encontraban no eran unas santas más bien unas diablas, yo no era santa pero ellas eran simplemente asquerosas.

Katherine me miro y rio por lo bajo, yo sabía por qué pero no le preste atención eso ya no dolía. Yo no era una zorra como ella, si me avía enredado con algunos chicos pero no pasaba del típico meter mano y besos subidos de tono, pero ella no era así ella si se metía con cualquiera y le importaba poco si esa persona tenía una relación o no.

Las otras dos ni que decirlo eran casi iguales a Katherine, ellas si no repararon en mí solo seguían coqueteando con un chico pelinegro y un castaño.

Seguí caminando y salí rápido de allí, no quería encontrarme con el perrito faldero de Katherine hoy no me apetecía.

Llegue a mi primera clase, el aula no estaba muy lejos de la entrada y por lo que puede ver del aula estaba algo sola.

-¿Cuándo me darás respuestas? Daniel.

-Pronto.- el miro un poco el aula antes de hablar.- ¿Qué te parece si almorzamos hoy?

-Sí por mi bien y le aviso a las chicas.-el me sonrió con mi repuesta.

-Paso por ti antes del almuerzo.-afirmo.-Por ahora, adiós.

Se acercó y me dio un beso en mi mejilla eso me tomo algo por sorpresa. El solo se alejó y yo me quede viendo su espalda hasta desaparecer en una esquina.

Ingrese en el aula y de inmediato divise a mis amigas con ellas la chica nueva.

Vi como cotilleaban entre ellas y como el rostro de Erika iba tomando color rojo, a lo que las demás solo reían, mis amigas pueden ser crueles a la hora de bromear entre nosotras.

La primera en verme fue la chica nueva Elizabeth ella me sonrió y yo a ella le hice un gesto de que guardara silencio mientras me acercaban a las demás que reían mientras Erika mantenía la mirada en el suelo.