Extras Litost

2. [Ruth Crowe]

Dato Curioso No. 2

|La más reciente película llamada "Old Boy" me inspiró a escribir esta historia, es por eso que la menciono una vez.|

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[0.2 PASADO]

01 / Julio / 1978

—No quiero hacerlo papá —suplico con lágrimas en mis ojos.

El alto hombre de cabellos azabache como los míos, se arrodilla hasta quedar a mi altura. —Hijo... —expresa con una sonrisa tranquilizadora—, no pasa nada. Las cosas a veces tienen que ser así. Dime una cosa, ¿por qué a los hombres malos los ponen en la cárcel? ¿Por qué son hombres malos?

Pienso mi respuesta unos segundos. —Porque hicieron algo que estaba mal.

—¡Exacto! —felicita mi padre riendo—. Las personas que cometen actos malos deben ser castigadas, justo como lo dice la sociedad, y ella —señala a la mujer atada de manos y arrodillada frente a mí—, hizo algo que estaba muy mal, le mintió a tu querido padre.

—Pero es mamá... —dudo tratando de no sollozar.

—¡Eso no interesa! —explota—. No puedes permitir que un hecho tan insignificante sea el tome todas tus decisiones. Las personas no aprenden hasta que salen lastimadas, es una ley. Ella no entenderá hasta que se lo enseñemos, y ya es hora que tu tomes el cargo, yo no estaré siempre ahí para ti, hijo.

—Pero papá...

—¡Te he dado una orden mocoso! —brama haciendo que retroceda. Mi cuerpo se estremece con cada paso que doy para acercarme a mi progenitora.

Lydia, mi maestra de mi primaria, y una de las personas más lindas que conozco, nos explicó que para ser felices debemos primero perdonar a los demás y a nosotros mismos.

Por como es mi madre y padre, sé que ellos me perdonarían por cualquier cosa, no obstante, no estoy seguro de hacer lo que estoy a punto de realizar, ya que de llevarlo a cabo, creo que no sería capaz de perdonarme a mí mismo... nunca.

Miro a mi madre, su cabello castaño desaliñado, sus ojos distantes, sé que ya está acostumbrada a este trato por parte de mi padre, mas no sé si será lo mismo para ella al hacerlo yo.
Mi padre, no es una mala persona, es amoroso, leal y se preocupa por los demás, sin embargo, cada vez que regresa de tomarse "unas copas" con sus compañeros de trabajo se convierte en una persona que apenas reconozco, mi mamá asegura que solo será por un tiempo, empero lleva diciéndome aquello desde hace ya tres años.

—Mamá... per-perdón —suplico tomando la navaja en mis manos y rodeando a Karen Crowe, para ver su espalda una vez que mi padre le ha removido su blusa, y haciendo que pueda analizar con mayor detalle las cicatrices que lleva.

—Descuida amor —tranquiliza mamá con lágrimas en los ojos—, haz lo que tengas que hacer.

Observo a mi padre por última vez, algo brillando en sus ojos como si fuera el cuadro perfecto de lo que siempre ansió tener, y no dudo más en hacer que mi brazo dé un profundo corte en la espalda de la mujer que me trajo al mundo... su castigo por haberle ocultado a mi padre el lugar en donde estaba escondido el licor.