Ni siquiera la muerte - (MelloxNear)

Capítulo 7 - Comienzos

Sentado en un piano, un niño de largos cabellos rubios sonreía danzando sus dedos ágilmente sobre las teclas...

Near pestañeó con molestia a causa de los rayos de luz que atravesaban las cortinas de su ventana, el sol de la mañana era fuerte y le tomo un momento acostumbrarse. Recorrió su blanca habitación con la mirada, dudando sobre si Mello seguiría en la habitación contigua o se habría escapado temprano como ya veces anteriores. El rubio era una persona leal pero a la vez independiente, así que no soportaba sentirse una carga para alguien más.

La idea de trabajar juntos lo emocionaba pero a la vez lo tenía intranquilo, las veces que hicieron proyectos juntos en Wammy's pues...no resultaron de lo más agradables, sus modos de trabajar eran muy distintos, lo que generaba discusiones sobre cualquier decisión a tomar. Mello lo criticaba por ser demasiado lógico, por perder tiempo profundizando la investigación en vez de actuar y por no querer tomar riesgos, yo criticaba su impaciencia, su imprudencia y su incapacidad de mantenerse alejado emocionalmente de los casos.

Éramos totalmente opuestos y en circunstancias normales se pensaría que involucrarse con el otro resultaría en un caos, pero Near se negaba a pensar aquello, su visión era diferente, para él sus diferencias en vez de distanciarlos hacían que se complementaran. Al mezclar tales mentes opuestas se creaba un equilibrio, los extremos sólo impedían el progreso. Mello era demasiado y Near era insuficiente, pero juntos podían lograr lo que fuera, incluso sobrepasar a L. Near estaba seguro de que trabajando en equipo desvelarían cualquier misterio, sólo hacia falta llevarse un poco mejor...

¿Pero cómo conseguiría eso? Sus habilidades de socialización eran decadentes, la única forma en que intentaba comunicarse con Mello cuando eran niños era sentarse cerca suyo y esperar a que el rubio le dirigiera la palabra. No comprendía la facilidad con la que los demás hacían amigos, mucho menos lazos románticos, hubo una vez en la que intento llamar la atención de Mello en ese modo, era el día de San Valentín, uno de los pocos días en el que tenían libertad de festejar celebraciones que podían 'afectar su desempeño académico y seriedad'.

Near nunca se había interesado por esa fecha, solo una excusa comercial para vender chocolates y cursilerías que ojala garantizaran un noviazgo para los demás chicos. Mello lo disfrutaba pero por razones diferentes, recibía una cantidad considerable de chocolates y bombones por parte de chicas esperanzadas que soñaban con tener una oportunidad del mejor alumno de Wammy's.

A Mello no le importaba ni una de ellas, solo aceptaba los regalos porque, si es que no se han dado cuenta aún, él adora el chocolate (de una forma poco sana a su parecer) y no podía pasar un día sin comer a lo menos 2 barras de chocolate. Near sabía esto y su plan le parecía obviamente inútil, ¿De que serviría enviarle un regalo si ni le importa quién lo envía? Decidió mandarlo de forma más implícita. El día siguiente Mello había recibido chocolates en forma de dados anónimamente.

De seguro Mello ya se había olvidado de eso, probablemente ni siquiera les prestó atención antes de echárselos a la boca. Near suspiró ante la ola de recuerdos que invadió su mente, desde que se reencontró con Mello el pasado parece imposible de abandonarlo. Se levantó pesadamente de la cama y se encaminó hacia el baño, su mirada reflejada en el espejo parecía ser la misma de hace años atrás, en tanto tiempo había cambiado muy poco, mientras que Mello había crecido y madurado significativamente, casi haber perdido la vida más de una vez le hizo tomar conciencia, ya no se sentía invencible ni en la cima del mundo, Near podría jurar que tenía miedo de perder lo que tenía y por fin había entendido la responsabilidad de ser el nuevo L.

Abrió la llave del lavamanos y se mojó el rostro, luego intento arreglar lo mejor que pudo su cabello ondulado y enredado, realmente le hacía justicia a su apodo. Luego de vestirse y asearse salió de su habitación, se paró frente a la pieza en la que estaba Mello (probablemente) pero se sintió incapaz de golpear la puerta, el nerviosismo le recorrió el cuerpo y pensó en lo ridículo que era tener miedo de alguien que conocía desde hace tanto tiempo.

Finalmente tomó valor y tocó la puerta...nada, Near estaba listo para decepcionarse y tirar a la basura todos sus deseos de trabajar juntos cuando escucho un leve ruido, ¿música? Near dio un suspiro de alivio, debía estar en el baño arreglándose, típico de él pasar horas dentro haciendo quién sabe, para luego salir en una nube de loción de afeitar, perfume y viéndose absolutamente encantador. Viendo que iba a estar un buen rato allí dentro prefirió bajar por el ascensor hasta el comedor, donde les esperaba un desayuno listo y humeante. Near contrataba cocineros dado a que su intelecto se limitaba por los quehaceres del hogar, era inepto en todo lo relacionado a limpiar, cocinar, planchar, etc. Si no tuviera el dinero para contratar personas que lo hicieran por él se vería en problemas.

Se sentó en el asiento de enfrente y sorbió un poco de té, su calidez lo calmó para lo que fuera que enfrentara ese día. En la mesa había tostadas con mantequilla que crujían deliciosamente, mermelada, queso, jamón, frutas, leche y unos cuantos pasteles y donas. Había una dona bañada en chocolate y nueces que pensó en dejar para Mello, si no amanecía con algo de chocolate seguramente estaría de malas todo el día.

Minutos después llegó el rubio, vestido con una camiseta holgada sin mangas de color negro y llevando su cabello amarrado en una cola de caballo, la cual acentuaba más su rostro fino y delgado, sus ojos azules como zafiros y su cicatriz que le cubría la mitad del rostro, le daba un aspecto más robusto e intimidatorio. Near aparto la vista de su figura procurando ocultar el sonrojo de sus mejillas.

"Buenos días..."-Dijo indiferentemente con un bostezo, sentándose a la mesa y tomando la dona de chocolate.

"Buenos días Mello, me sorprende que sigas aquí"- Mello lo miró molestó con los ojos entrecerrados.

"Eso solo fue unas cuantas veces, debía irme, tenía trabajo que hacer"

"¿Te comprometerás así también con este trabajo?"- Near estaba tanteando el terreno cuidadosamente para no despertar el enojo del rubio, ya lo conocía y sabia como manejar su temperamento.

"Lo intentare, pero tú también debes poner de tu parte para que funcione"- dijo apuntándolo con la cuchara de café

"Estoy seguro de que funcionará"- respondió Near con una sonrisa casi invisible, Mello levantó una ceja y lo observó intrigado

"¿Y bien? ¿Desde donde empezamos?"- Como siempre Mello estaba impaciente por saber todos los detalles y el método de trabajo, le gustaba hacer una pre visualización clara antes de indagar en una investigación.

"Creo que primero debemos analizar la situación que describiste ayer, es bastante probable que el asesinato de la familia enemiga este relacionado con la death note o con Kira en sí"

El rubio asintió y levantó su plato terminado-"Tenemos que comenzar lo más pronto posible, alguien tan poderoso con un arma como esa va a causar muchas muertes"

Near estaba de acuerdo, en realidad la death note hacía un cambio drástico en la mente de cualquiera, entre ellos Light Yagami. Después de terminar su desayuno ambos se dirigieron al cuartel general del SPK, una habitación oscura rodeada de computadoras, pruebas y archivos de casos, todo ordenado perfectamente con un centro vacío pata que Near analizara los casos junto a sus juguetes. Gevanni y Lidner estaban sentados en sus lugares de trabajo, se giraron momentáneamente sin decir una palabra ya que estaban enterados de las noticias, Rester en cambio se ausentó para investigar un caso alterno. Mello se sentía menos nervioso, al memos esta vez no lo apuntaban con pistolas al entrar.

"Mello, ¿Cuál es el nombre del jefe de la mafia que mencionabas? Lo buscaremos en nuestra base de datos"

El rubio estaba sorprendido por la avanzada tecnología dentro del edificio, él había tenido que arreglárselas solo con la ayuda de Matt para hackear los sitios criminales en la web-"Ross, Rod Ross"

En la pantalla central aparecieron fotografías e información de Ross, un hombre moreno y macizo, de cara robusta y amenazadora, tenía calva pero una barba prominente y ojos obscuros que denotaban la naturaleza de su oficio.

"Es él"

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N/A: y porque lo pidieron aqui esta el nuevo cap :DD mañana entro a clases que horror no quiero (ToT) pero no tengo mas opcion :c obvio que no significa que deje de actualizar, voy a continuar el fic como pueda! :3 gracias por leer y sigan la historia!