Capítulo 9 - Lenguajes

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Mello se sentó en la banqueta delante del piano, el cual sorprendentemente se encontraba impecable y limpio a pesar de el poco uso que se le daba, estaba casi seguro de que él era la única razón por la que el instrumento seguía allí.

Delgados espacios negros y blancos que denotaban un tono diferente, pero en conjunto componían infinitas melodías que el rubio estaba dispuesto a explorar. Posó sus dedos levemente en cada nota y liberó el aire de sus pulmones para prepararse, luego con admirable delicadeza presionó las teclas en una secuencia única, del piano brotó una melodía familiar, nada más que una canción escrita por sí mismo. Sus dedos danzaron por los acordes mientras su mente recordaba los orígenes de aquel sonido por el cual sentía tanto apego.

Estaba nervioso, su respiración era un tanto acelerada e intercambiaba su peso de un pie a otro con ansiedad. Estaba sentado frente a un piano, muy distinto del actual, era de un color negro azabache y con terminados de madera muy detallados. A su lado estaba de pie Watari con una expresión calmada en su rostro y su usual vestimenta formal, en la mano llevaba una bandeja de plata que rebosaba con pasteles, dulces, galletas y variadas golosinas. Mello había pensado en preguntarle si es que podía probar uno pero la timidez lo mantuvo callado.

De repente se rompió el silencio por el ruido de la puerta de la habitación contigua, a través de ella entro un joven de espalda encorvada y cabello obscuro desordenado, sus ojos estaban cansados y eran ensombrecidos por marcadas ojeras que le daban un aspecto parecido al de un mapache. Al mirar a aquel hombre el rostro de Mello se iluminó y se llenó de emoción, no era cualquier persona, ese joven era L, su mayor inspiración y modelo a seguir. Todo su esfuerzo por ser el mejor entre todos los estudiantes era para llegar a ser digno sucesor de L, soñaba con ser como él, admirado y respetado, defendiendo la justicia y la ley.

El detective los saludo a ambos y tomó un trozo de uno de los tantos pasteles que ofrecía la bandeja, luego se sentó en un sillón listo para presenciar el producto del arduo trabajo del rubio.

"Puedes empezar cuando desees"- Dijo el moreno con una sonrisa cálida, Mello tragó saliva y asintió, estaba nervioso ya que iba a ser evaluado, L le había dado 3 meses para que compusiera una canción por si solo. Dentro de Wammy's no solo se trabajaba solo la lógica sino que también las habilidades artísticas y la creatividad.

Empezó a tocar al principio de manera ansiosa pero poco a poco sus dedos se relajaron y la melodía fluyo en la habitación. Era una tonada que empezaba de forma desconsolada y melancólica, era un grito de ayuda que intentaba hacerse escuchar por medio de la música. Mello quería expresar lo que había sentido el día que fue abandonado por su padre en el orfanato, se había negado a entrar y permaneció sentado en el pórtico durante la fría noche, esperando a que volviera a buscarlo, pero aquello nunca sucedió.

La música daba una atmósfera de confusión y miedo, pero no era un terror sofocante que consumía, era un miedo inocente, el mismo del pequeño Mello que se sentía asustado al enfrentarse solo al mundo. El miedo de aquel niño que se sentía perdido sin la guía de su padre y dependía de los demás, buscando entre la gente una mano adulta que cogiera la suya y lo protegiera de todos los males, pero se sentía abandonado y vulnerable sin nadie a su lado.

Lentamente la melodía se convirtió en una esperanzadora, había encontrado un motivo para seguir adelante, L le había mostrado una posibilidad de superar su pasado y construir un futuro que lo llevaría a la felicidad. Un sueño de dejar todo atrás y vivir en un mundo lejos de todo aquello que lo había dañado. Dentro de su familia disfuncional pudo haber sido tratado como un problema, algo que solo daba más trabajo a sus padres y que su única opción era librarse de él abandonándolo a su suerte. Pero en cambio el jamás se abandonaría a sí mismo, Wammy's lo había acogido y le dio una nueva oportunidad, L le dio esperanzas y le hizo sentir que tenía un gran valor, que sus habilidades podían ayudar al mundo y que su esfuerzo nunca sería en vano.

La canción había terminado, todo se encontraba en silencio y Mello esperaba con anticipación el juicio de L.

"La música es el lenguaje del alma, si cuando tocas los demás sienten lo mismo que tú significa que haz dominado aquel lenguaje"- Mello estaba sorprendido, era la primera vez que escuchaba a L hablar de forma tan abstracta, solía hablar lógicamente y sin centrarse en la parte sentimental de las cosas-"Y tú lo lograste, Mello"- L sonrió con aprobación y lo invitó a sentarse para que probará cualquiera de los dulces.

Mello abrió los ojos al tocar la ultima nota de su composición, se había dejado sumergir tanto en la música que perdió la noción del tiempo y el espacio. Al darse la vuelta su respiración se cortó por la sorpresa, Near estaba allí, apoyado contra el marco de la puerta, con una mirada que no alcanzaba a descifrar.

"No sabía que estabas aquí"- dijo el rubio defensivamente, levantándose del asiento dispuesto a irse

"Esa canción es hermosa"- Menciono el albino en voz baja, Mello se detuvo y suspiró-"La escribí hace tiempo, es la primera vez que la toco desde hace años"

"Eso no cambia nada, yo...yo también me sentía de esa manera"- Near titubeó, era difícil expresar sus sentimientos, pero Mello lo había hecho de forma exacta.

Mello no sabía que decir, pero debía tener razón, habían estado en situaciones similares y ambos habían sido salvados por sus capacidades. Pero en el caso de Near él fue arrebatado de su familia, lo cual era aún peor, ya que no existían posibilidades de que volvieran a buscarlo. Él debió haberse sentido verdaderamente solo y aún mas tomando en cuenta que había llegado más joven que él. Una parte de si mismo empezó a entender el por qué del actuar de Near, los dos eran parecidos en el hecho de que buscaban separarse del dolor que tuvieron antes, uno aislándose de los demás y el otro imponiéndose ante los demás.

Se acercó al albino y lo rodeó con sus brazos, de la misma manera que había deseado que lo hicieran para que se sintiera seguro. Near pudo sentir como Mello atravesaba sus muros con facilidad, casi como si fueran invisibles.

"Esta bien, lo entiendo"- Mello dijo con voz tranquilizadora, era la primera y no la última vez que Near le dejaría observar su interioridad oculta.






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N/A: holaaa, por fin actualizacion wiii (/^▽^)/ esta vez quise centrarme más en mello porque pense que hacia falta analizar su personaje e historia, ademas me gusta pensar que L tuvo contacto mas cercano con sus sucesores!
de nuevo perdon por el atraso pero colegio = caca asdgjljhfjddk muuuchas gracias por seguir la historia, me alegra saber que les gusta y me encanta leer sus comentarios :3 abrazos para todas(os) <3 <3

Ni siquiera la muerte - (MelloxNear)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora