MY GIRL 2 (LIAM PAYNE Y TU)

capitulo 37.- adiós.

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La fiesta finalizó más o menos cerca de las 2 am, papá insistió en que dani, peter, Ross y yo nos quedáramos a dormir en casa de él y anne.  Estábamos tan cansados que apenas y tuve las ganas de ir a ponerme mi pijama y lavarme la cara, el pijama era uno de los viejos, de ropa que dejé aquí, pero me quedaba igual que cuando tenía los dieciocho, Ross tomó unos shorts prestados de papá y una camiseta al igual que peter. Dormir en mi vieja habitación se sentía siempre muy extraño, pero de alguna forma rara, me gustaba. Fui cerrando mis ojos, hasta que me perdí entre sueños.

-¡mamá!... ¡mamá!... ¡mamá despierta!- los gritos de josh me despertaron algo alterada, Ross igualmente se encontraba a mi lado algo desorientado.

-¡qué le pasa a mi mamá!- entonces recordé que estaba en casa de mi padre, me quité las sabanas de encima y corrí a la habitación continua, josh estaba sacudiendo a anne quien no se movía para nada… danielle llegó justo detrás de mí pero soltó un grito al ver la escena.

-¡mamá!, ¡reacciona!- me tapé la boca y llevé mi mano derecha al pecho, la respiración estaba comenzando a faltarme.

-¡que pasa danielle!, ¿Qué tiene mi mamá?- decía josh desesperadamente, una vez que logré tranquilizarme un poco me acerqué al cuerpo de anne, la toqué, aún se sentía tibia, pero ya no tenía pulso,  tomé el de su muñeca, luego el del cuello… nada.

-no…no tiene pulso- no sé si me habrían escuchado, aunque al parecer sí lo hicieron, puesto que Ross y peter se aproximaron a nosotros con la palidez de haber visto a un ente maligno.

-no…- danielle se abrazó a su mamá mientras se acomodaba a su lado en la cama, mi hermanito seguía callado, pareciese perdido en su propio mundo, seguramente papá habría salido a comprar algo para desayunar, no sé si tenga el valor para decirle esto por teléfono, pero primero tengo que llamar al hospital y que envíen a la morgue.

La puerta de la entrada sonó, seguramente era mi padre, corrí escaleras abajo con el corazón golpeándome las costillas dolorosamente, él me sonrió como si nada estuviera pasando.

-traje algunas cosas que faltaban- sin si quiera percatarse de mi cara de angustia él pasó de largo hasta la cocina, ¿Cómo se lo digo?

-papá…- él se giró a verme una vez que puso las cosas encima del mueble.

-dime, cariño- solté un suspiro que me dejó sin aire, las manos y las piernas me temblaban con sobre naturalidad pero aún seguía de pie.

-papá… anne… anne… ella… murió- decirlo solo me hace sentir peor, pero ver a papá recargarse contra el refrigerador y llorar desconsoladamente, eso sí que me hacía sentir horrible.

-¿Dónde está?- dijo calmando sus sollozos por un instante.

-arriba, en la habitación- vi como corría escaleras arriba, yo aún seguía en shock, tanto que me era imposible llorar, mi sistema nervioso estaba colapsado, como aquella vez en parís.

El timbre sonó, Ross estaba en la puerta hablando con unas personas que supuse eran las del hospital,  me alegra que él se encargara de ello, porque yo no tenía cabeza para nada.

-está arriba- escuché que dijo, tres uniformados entraron a la casa con una camilla, les seguí hasta la segunda planta de la casa, mientras tanto Ross ya los había guiado a la habitación, dani estaba aún abrazada a su mamá con la mirada perdida en un punto de la pared. Papá abrazaba a josh a un lado de la cama y peter era una estatua en la esquina.

-dani… tienen que llevársela- le dije tratando de sonar suave, ella se abrazó más a anne.

-no… quiero estar con ella… váyanse- los ojos se me aguaron, entonces toda esta situación se me vino encima, por fin lo comprendí, anne estaba muerta. Pero me era imposible asimilarlo como cualquier cosa.