Tus días con Grant Gustin

¿Cómo un mensaje puede crear tanta confusión?

Son las ocho y media de la mañana y te descubres completamente desnuda en la cama que anoche crujía estrepitosamente.

Es relativamente temprano como para salir cuidadosamente de la habitación y que vuestros amigos no se enteren que Jared y tu habéis dormido (y no solo dormido) juntos.
No es momento de que una noche de pasión se malinterprete y menos con Alex y Alice de por medio.

Te levantas cuidadosamente de la cama y Jared se mueve instintivamente pero sin despertarse. La sábana no ejerce su función y puedes contemplar su espectacular cuerpo detenidamente, como si contemplases por segunda vez el David de Miguel Ángel que tanto te sorprendió en tu viaje a Florencia hace ya muchos años.

Estás realmente confusa y tu cabeza necesita despejarse. Te vistes con lo primero que pillas de la bolsa de viaje y sales fuera de la cabaña ataviada con una gruesa manta y un café caliente.

Justo antes de salir, tu móvil reclama tu atención y un leve sonido sale de sus entrañas. Te acercas a él y descubres una pantalla que te avisa de ciertos mensajes de tres chats  diferentes.

Tienes más de 100 mensajes del grupo que compartes con tus amigas de toda la vida y que has dejado muy lejos. Las echas de menos y desearías poder explicarles, en persona, todo lo que te está sucediendo. Logicamente están al día de todo lo sucedido con Grant y tu ascenso, pero todo lo de Jared aun no ha salido de tu boca. Cuando estés preparada lo contarás y eso no será muy tarde.

Los siguientes mensajes corresponden a tu madre, siempre preocupada por ti. Quizás demasiado. Pero la quieres igual.

La tercera conversación te da un vuelco el corazón. Dos mensajes, dos lineas que te sorprenden y asustan por igual.

>>Te echo de menos
>> Lo siento

No puedes creer que ese mensaje sea de Grant, una serie de emociones se remueven en tu interior y sientes unas ganas tremendas de llorar. No sabes si vas a aguantar volver a verle el lunes. No sabes si quieres eso nuevamente, si busca lo mismo o si es unicamente una disculpa.

Justo en el momento en el que una lagrima empieza a descender por tu mejilla, una mano caliente y reconfortante toca tu hombro. Te giras tras limpiarte la mejilla y sonries a Jared que te mira con una sonrisa en la cara desde su metro noventa de altura.

Te levantas de las escaleras del porche y le abrazas, tapando su torso desnudo con la manta. Él te da un beso tierno y ardiente a partes iguales y en tu mente se crea un mundo de confusión sin igual.

Nota: Hola a todos nuevamente! Espero que os siga gustando tanto mi historia. He decidido seguir con el "triangulo amoroso" porque he visto que la acogida de Jared ha sido muy buena y me alegro que sea así porque es un personaje que me gusta mucho.
Espero vuestros comentarios
Saludos

Eris