Hace pocos días, fui a disfrutar de un bonito día de campo, se respiraba un agradable olor a aromáticas silvestres como tomillo, lavanda, romero, jara, etc. Los rayos del sol calentaban el ambiente de una jornada de invierno en Sevilla.
Podía ver a los pájaros y oír sus cánticos, me detuve delante de una gran valla de espinas que delimitaba una finca con el campito donde yo estaba, pude ver a lo lejos unos toros bravos, se encontraban comiendo tranquilamente la poca hierba que quedaba tras las heladas de cada día. Yo observaba como ellos tenían un gesto de felicidad y paz, pero de pronto se me vino a la mente la espantosa, macabra, fea y perturbadora tradición que hacen con estos pobres e inocentes animales.Para que entendáis más contaré un pequeño cuento:
Nuno era un toro bravo, solía pasar los días corriendo, comiendo, durmiendo, en fín, lo que un toro hace. Un día lo llevaron en un camión junto a sus hermanos hacia un lugar, ese lugar estaba lleno de personas gritando, riendo... Al cabo de un buen rato, Nuno salió a la plaza donde lo esperaba un hombre (si se le puede llamar así) con una gran tela roja y vestido de "payaso", Nuno comenzó a investir a aquella tela, pero no porque Nuno fuera agresivo, si no porque es un toro bravo y es su instinto y ¡no tienen la culpa de ello! y nosotros no lo podemos cambiar.
Para él esto era como un juego ya que adoraba a los humanos. De pronto aquel "hombre" sacó dos banderillas de acero y un gran pincho en la punta y de una gran golpe se lo clavó a Nuno en el lomo, pudo sentir como el frío acero rompía su piel y desgarraba su carne y hacía que la sangre saliese a borbotones. Él no entendía porqué le hacían eso, ¿qué había hecho el mal?.
Siguieron clavándole más banderillas del diablo y Nuno se iba consumiendo más y más. Hasta que el hombre sacó una gran espada y se la clavó en el cuello a Nuno y este, se desplomó, antes de cerrar los ojos para siempre se preguntó: ¿Por qué los seres humanos hacen esto conmigo? ¿Qué había hecho el mal? Miró a las gradas, todo el mundo aplaudía feliz y parecían pasarlo en grande, Nuno no daba crédito ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? No paraba de repetirselo. Finalmente Nuno cerró los ojos por última vez y luego fue el turno de sus hermanos.Y ahora digo yo: ¿hay necesidad de esto? ¿qué nos hace un pobre toro? En fín, aquí hay mucho paletos/analfabetos y claro... así piensan...
Yo no obligo a nadie a pensar como yo, pero solo pido que os pongáis en la piel de Nuno.
¡¡LOS ANIMALES SIENTEN EL DOLOR IGUAL O MÁS QUE LOS HUMANOS, ASÍ QUE NO SIRVE LA ANALFABETA EXCUSA DE: "SON ANIMALES Y NO SUFREN"!!
¡¡PARAD YA Y EVOLUCIONAD!!
¡¡¡¡¡TAUROMAQUIA ABOLICIÓN!!!!!
¡¡¡¡¡NI ARTE NI CULTURA, ESTO ES TORTURA!!!!!
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¡No Al Maltrato Animal! (#PonVozALosSinVoz)
אקראיSoy un chico de 15 años que no descansará hasta la abolición de los "festejos" donde maltratan animales, y cualquier tipo de maltrato animal.