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Me agradas

Una semana.

Ya había pasado una semana desde que ocurrió el suceso en Biblioteca, y desde ese entonces "Theodore Nott" no me había escrito. Por suerte ese día no me lo tope, me hubiera dado mucha vergüenza haberlo visto ahí. Era tan extraño todo esto, extrañaba de cierta forma que me mensajeara, era divertido discutir con alguien.

No me quería hacerme "ilusiones" sabía que por gracias a Ginny y su manera tan extraña de escribirle tal vez hizo que se asustara o perdiera el interés. Da igual, siento que le estoy dando demasiada importancia a este individuo, además..de igual manera yo no le volví a escribir contándole que me habían agarrado mi O-2Magic, iba a sonar muy patético, porque para empezar...¿Por qué tendrían que agarrar mi O-2Magic para mensajearle? Era muy obvio y sospechoso. Lo mejor era dejarlo todo así.

Como todas las mañanas bajé al Gran Comedor para desayunar. Había sido de las primeras en bajar ya que solo éramos como veinte alumnos en toda la sala. A los diez minutos bajaron Harry, Ron y Ginny, esta última agarrada de la mano de Harry. Los tres se sentaron y comenzaron a servirse el desayuno. Ron se sentó a un lado mío y me dio un beso en la mejilla.

–Hola Mione –Me saludo Ron.

–¿Acabaste tus tareas? –Le pregunté, aburrida. Todo era muy rutinario.

–Amm –Se quedó un rato pensando–. Sí, creo que las acabe todas ayer.

–Bien –Dije y le di un sorbo a mi jugo de calabaza.

Después del desayuno fui a clases, luego a comer algo otra vez en el Gran Comedor y al terminar me fui directamente a mi habitación a comenzar las tareas. Debo de dejar de terminar la tarea tan rápido, me estoy quedando sin hacer nada interesante por las tardes.

Mi vida de resumía a eso. Desayuno por las mañanas, clases, comida y encerrarme en mi habitación hasta la hora de cenar para después volver a encerrarme.

–¿Hermione? –Me pregunto Ginny, en la cena.

–¿Ah? –Di un brinco del susto, me había quedado otra vez en mis pensamientos.

–¿Estas bien? –Me preguntó Harry. Ginny, Ron y Harry me miraban confundidos.

Asentí con la cabeza y miré mi plato, estaba vacío.

–¿Dónde quedo mi comida? –Pregunté, ida.

–No te has servido nada –Ron empezó a reírse–. Llevas así como diez minutos ¿estas enferma, Mione?

–Oh...–Dije–. No, no...creo que no tengo mucha hambre, mejor me voy a mi habitación, no he acabado las tareas.

–¡Como crees! –Exclamo Ron–. No, Hermione, tienes que comer aunque sea algo. No puedes irte a dormir con el estómago vacío.

–Me llevaré una manzana –Dije y agarré una del plato de manzanas–. Creo que comí mucho hoy y por eso no tengo tanta hambre.

–Uhm, esta bien –Dijo Ron, no muy convencido–. Tú eres la lista aquí.

Le sonreí a los tres y me levanté de mi asiento para irme. No sin antes voltear a la mesa de Slytherin, ahí estaba Theodore Nott con Blaise Zabini riéndose de sabe qué cosa. Encogí los hombros y salí del Gran Comedor. Camine por los pasillos y justamente mi topé con Malfoy, parecía que él apenas iba a entrar al Gran Comedor. Cruzamos miradas y fue todo.

Al llegar a mi habitación agarré mis libros y continúe con la tarea. Habían pasado horas y mi O-2Magic sonó por primera vez en todo el dia, supuse que debía de ser Ron con su típico mensaje de "Buenas noches" así que tarde un poco en contestarle y cuando por fin fui a revisar mi O-2Magic me llevé una grande sorpresa porque ese mensaje no era de Ron, sino de alguien más.