❝ It's my party and I'll cry if I want to ❞

736 61 46
                                    

Ship: Kellic
Advertencia: Baja autoestima, pastel!kellin

// —Melanie Martinez - Pity Party //

Narrador omnisciente

Kellin nunca había estado más emocionado en toda su vida; por fin era su cumpleaños dieciséis y planeaba hacer una gran fiesta e invitar a todos sus amigos. Sólo había un problema.

Él no tenía amigos.

No era porque Kellin no quisiera. En realidad, él era amable con todos a su alrededor, pero al parecer eso se veía opacado por su gusto a los vestidos y faldas de colores pastel.
Él no entendía por qué la gente lo odiaba por cómo se vestía, ni por qué lo insultaban por su forma algo infantil de ser.

Pero a pesar de todo, él seguía siendo positivo con su fiesta. En su mente todos olvidarían su odio por un día y vendrían a celebrar con él. Imaginaba cientos de regalos y felicitaciones, y con eso en mente, se levantó de su cama mucho más temprano de lo que tenía que hacerlo.

Bajó hacia la sala de estar para empezar a hacer las invitaciones, sin molestarse del ruido que hacía ya que sus padres nunca estaban en casa.
Con entusiasmo, comenzó a escribir cada una de las invitaciones, poniendo todo su empeño en ellas.
Cuando las terminó, las empacó en su mochila para después salir corriendo a la escuela; se le había hecho tarde por estar preparando todo.

En cuanto llegó, todas las miradas se dirigieron hacia él. Varios murmullos se escucharon a su alrededor, pero ya que no decían nada bueno, decidió no hacerles caso y dirigirse hacia la primera persona a la que invitaría a su fiesta; Víctor Fuentes.
Kellin siempre se había sentido atraído hacia el moreno, y que él fuera alegraría su día.

Con nerviosismo, se acercó a Víctor, tocando su hombro con delicadeza.
—¿Qué quieres? —preguntó el mayor al ver a Kellin frente a él.
No es que él quisiera ser grosero con el pelinegro, pero si quería seguir siendo popular en la escuela, tenía que hacerlo.
—Y-Yo... Hoy e-es mi fi-fiesta d-de cu-cumpleaños —dijo, sintiendo sus mejillas sonrojarse antes de entregarle la invitación.
Víctor quiso reír por la forma en que las pequeñas manos de Kellin temblaban al tenderle el sobre rosa pastel, pero se contuvo, aunque sus amigos no.
—¿Por qué Vic habría de ir a tu fiesta, fenómeno? —se burló uno de ellos.
Kellin decidió ignorar su comentario innecesario y en lugar de contestarle, le tendió una invitación.
—T-Tú también es-estás invitado —sonrió.
Aquel chico tomó el papel en sus manos, fingiendo interés mientras lo observaba antes de romperla frente al rostro de Kellin.
—No quiero ir a tu estúpida fiesta, y dudo que alguien quiera hacerlo —gruñó, ganando la atención de todo los que había cerca.

Todos miraron como los ojos de Kellin brillaban por las lágrimas, y en lugar de defenderlo, comenzaron a reír. Lo único que pudo hacer el pelinegro fue salir de allí corriendo, tratando de huir de las risas que se escuchaban por todo el pasillo.

[...]

Entregar las invitaciones no había salido bien para Kellin, pero aun así terminó de entregarlas todas con una gran sonrisa en su rostro, y cuando volvió a su casa comenzó a arreglar todo para su fiesta.
Infló cientos de globos de color rosa y azul pastel, los cuales dejo flotando en la sala de estar. En la pared colgó un enorme cartel que decía "feliz cumpleaños" que combinaba con los gorros de fiesta que había en la mesa de estar.
En la mesa también estaba un pastel de chocolate que Kellin había horneado el día anterior junto con juegos de mesa y peluches que había comprado para entretener a sus amigos.

Cuando terminó de preparar su casa, corrió hasta su habitación y después de tomar una ducha se puso su vestido favorito, el cual era uno color rosa pastel, más claro en la parte de arriba que abajo, con holanes en la parte donde caía por sus piernas, cubriéndolas casi por completo para sólo dejar a la vista sus tacones blancos.

One Shots (boyxboy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora