Entra en mi vida [Lee Donghae]

Capítulo 12

Todavía quedaban algunos cabos sueltos en la relación de Alissa y Donghae, principalmente la relación de la familia de Donghae, ya que él había hecho algo que nunca se hubieran imaginado, había renunciado a ser el sucesor de su padre y había dejado todo por buscarla a ella, ese fue el acto de mayor valentía que había hecho alguna vez, ya que nunca había contradicho lo que sus padres le ordenaban, pero de algo si estaba seguro no podían mandar en los sentimientos que el tenia hacia Alissa.

— Tengo que decirte algo esta noche — le dijo Donghae a Ali mientras ella se preparaba para ir a trabajar.

— ¿Esta noche? — el asintió — bien entonces nos veremos esta noche...pero y mientras que vas hacer.

— No te preocupes por eso yo me encargo.

— Ok señor misterioso, entonces nos vemos más tarde — ella se despidió con un efusivo beso que casi hace que él no la dejara salir de la casa.

Las horas pasaron de lo más tranquilas en el trabajo de Ali, pero de cierta manera ella se encontraba nerviosa, no sabía qué tenía planeado Donghae para la noche, por eso se sentía ansiosa. Se despidió de las otras chicas y cerró el local cuando se percató que en la acera de enfrente se encontraba Donghae esperándola.

— ¿Que no se supone que me ibas a esperar en casa? — le dijo ella al llegar donde estaba él.

— Si... es cierto... pero ya no podía esperar para verte — dijo él con una sonrisa en sus labios mientras la besaba.

— Y bien vas a decirme cual es el misterio... por que me tienes realmente intrigada.

— Espera y veras... ven vamos por aquí.

Él ya había hecho un recorrido previo por el lugar al cual se dirigía junto Alissa; antes de llegar él le vendo los ojos y la llevó hacia un hermoso jardín que estaba iluminado con miles de pequeñas luces que se asemejaban a las estrellas.

— Ahora puedes quitarte la venda — le dijo él, mientras rápidamente ella lo hacía.

— ¡Oh Dios mío!, Donghae es... es...impresionante.

— Sabía que te gustaría — dijo él con una sonrisa de satisfacción.

— ¿Y qué hacemos aquí exactamente?

— Vamos a cenar — dijo el enseñándole al fondo una pequeña mesa para dos, iluminada por velas.

Se sentaron a degustar todo lo que él había preparado para ella, hasta que él le dijo que necesitaba hablar de algo más serio con ella.

— ¿Y bien?

— Solo quería demostrarte cuanto te amo — dijo el mientras tomaba sus manos y depositaba algo en ellas.

— ¿Y esto? — dijo ella al notar una pequeña hoja de papel.

— Desdóblalo.

En la nota solo estaba escrito "Quiero pasar el resto de mi vida contigo", en cuanto ella lo leyó él se levantó de la mesa y extendió su mano para que ella la tomara y se levantara también.

— Y ¿qué me dices?

— Yo... yo...

— Vaya tal parece que por primera vez te has quedado sin palabras — dijo el tocando su mejilla.

— Es que así me siento... no sé qué decir.

— Es fácil... que tú también quieres pasar el resto de tu vida conmigo.